Derribos. Con integrantes de distintas fuerzas federales, las BEM comenzaron a operar en abril exclusivamente en investigaciones de narcomenudeo.


Las 41 Brigadas Especializadas en Microtráfico (BEM) que comenzaron a trabajar en los últimos tres meses en la Capital Federal y en las provincias de Buenos Aires y Santa Fe, entre otras, con el fin de detectar nuevos búnkeres de droga, incrementaron casi un 75% el promedio mensual de hallazgo de estos puntos de venta.

Los datos surgen de una estadística difundida por el Ministerio de Seguridad, que desde diciembre de 2015 desarticuló, a través de operativos de fuerzas federales, 2.298 Puntos de Intervención de Comercialización de Drogas (PIC), de los cuales el 60% se concentraba en los mencionados distritos.

"Cada vez que desarticulamos un kiosco, se puede llegar al vendedor o al capitalista. Este programa el objetivo que tiene es el punto de venta, que es el final de una cadena", explicó la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.

La funcionaria agregó que el objetivo del plan es reducir el microtráfico de drogas a nivel barrial y que "la idea es que los PIC no vuelvan a abrir nunca más y que la denuncia de la gente tenga un valor social", ya que gran parte de los búnkeres se descubren tras llamados a la línea 134.

Por su parte, el secretario de Narcotráfico, Martín Verrier, explicó que las otras fuentes de información son la inteligencia criminal; los fiscales, especialmente en las provincias donde la lucha contra el narcotráfico fue desferalizada y las intendencias, que aportan información a través de vecinos o foros de seguridad.

Las brigadas también están actuando en Rosario y Gran Rosario (siete), en el partido de General Pueyrredón (cinco), en Godoy Cruz, Mendoza (dos); y en el barrio El Nylon, de Córdoba capital (una).

En total, en esta etapa piloto, son 41 BEM en las que se desempeñan 164 detectives que cuentan con equipamiento de última tecnología y que son entrenados exclusivamente para el microtráfico de estupefacientes.

La idea de implementar este plan se inspiró en "Microtráfico Cero" (MT-0), un programa puesto en marcha en Chile en 2015 durante el gobierno de Michelle Bachelet, que llevó de un 10 al 70% la efectividad de las investigaciones por drogas y que se convirtió en modelo para otros países de la región, entre ellos México.

Recuperar los espacios públicos y devolver la tranquilidad en los barrios fue el objetivo de la Policía de Chile que ahora busca ser imitado en la Argentina y replicar en todas las provincias en un plazo máximo de dos años. De hecho, de acuerdo a las estadísticas, ya suman 2.306 los PIC que fueron convertidos en espacios culturales o huertas como la que se inauguró ayer en la localidad bonaerense de San Miguel. En tanto, 2.298 puntos de venta minorista fueron desarticulados entre el 10 de diciembre de 2015 y el 28 de junio de 2019, es decir casi un 12,5 por semana y dos por día.

De esos "kioscos", el 23% se encontraba en Buenos Aires, el 19% en la ciudad de Buenos Aires, el 15 en Santa Fe y el 6% en Tucumán, según los datos oficiales.

En menor medida se hallaron en Entre Ríos, (3%), Corrientes (4%), Neuquén (4%), Misiones, Córdoba y Río Negro (3%), Santiago del Estero, Catamarca y Salta (2%).