El Senado aprobó en la madrugada de ayer, sin el apoyo de la oposición, el proyecto de reforma judicial con modificaciones de última hora para asegurase el apoyo de los gobernadores pensando en el debate que a partir de la semana que viene tendrá epicentro en Diputados.

La propuesta del Gobierno fue aprobada por 40 votos afirmativos del Frente de Todos y sus aliados contra 26 votos negativos de la bancada opositora de Juntos por el Cambio, que mantuvo sus cuestionamientos por considerar que la reforma "no era prioritaria" en medio de la pandemia de coronavirus.

El oficialista Frente de Todos introdujo cambios que fueron leídos durante 10 minutos, lo que se ganó el repudio de la oposición que calificó a los retoques como "reforma de la reforma".

Durante el debate de comisiones, los gobernadores ya habían negociado que la reforma de la justicia también impacte en el interior del país. De esa manera, se acordó la creación de un total de 94 cargos nuevos en juzgados, fiscalías y defensorías y de cámaras de apelaciones en siete provincias pero dentro del recinto se incorporaron 4 más. Además, el eje conurbano cobró fuerza: La Matanza tendrá Cámara de Apelaciones propia y se incorporaron juzgados también en Tigre y Pilar.

Hoy, hay 10 provincias que deben recurrir a los tribunales de alzada federales en distritos vecinos. Pero con esta Reforma, sólo se quedarán sin Cámara de Apelación propia Tierra del Fuego y Neuquén.

En el dictamen de comisión ya se habían incorporado tribunales de alzada en Catamarca, Jujuy, San Juan, Santiago del Estero, Formosa, San Luis y se ampliaban los de Rosario (Santa Fe) y Mar del Plata (Buenos Aires).

Con el retoque se sumó una Cámara de Apelación en La Rioja y La Pampa y se amplió la de General Roca, en Río Negro.

Pero además sorprendió la ampliación de estructura judicial en el distrito de La Matanza. El proyecto ya creaba juzgados, pero sobre la hora se sumó ahí también una Cámara de Apelación, un reclamo de años del distrito más popular del país que hoy debe acudir a los tribunales de Morón.

Sobre la hora de descuento también se sumaron dos juzgados en la localidad de Tigre y 1 en Pilar. El proyecto ya contemplaba otros en Avellaneda, Quilmes, Lomas de Zamora, entre otros distritos del AMBA.

"Trataron al Conurbano como si fuera una provincia más", se quejaron desde la oposición y deslizaban que el titular del Diputados, Sergio Massa, estaba detrás de los acuerdos

Pero el reparto de poder entre más provincias no fue el único cambio de última hora. En un gesto para acallar muchas voces que se levantaron en contra, el oficialismo decidió retirar el inciso que se había agregado al proyecto original, por impulso del senador ultra K, Oscar Parrilli, que suponía un apriete o censura a los medios de comunicación.

En síntesis, se excluyó la palabra mediáticos del artículo que obliga a los jueces a denunciar presiones de grupos de poder.

La oposición alzó la voz contra los cambios dentro de la misma sesión. "Esto es una especie de reforma de la reforma", se quejó el jefe del interbloque de JxC, Luis Naidenoff. "Ya hubo un dictamen y ahora hubo 10 minutos de lectura de modificaciones", agregó el radical Martín Lousteau.

"Senador, van a votar en contra", le respondió la presidenta del Senado, Cristina Kirchner. "No importa, es por el buen funcionamiento de la Cámara", retrucó el senador porteño.

Las repercusiones siguieron en las redes. "El presidente creaba con su proyecto una Reforma Judicial de 279 cargos. El oficialismo lo modificó y pasaron a ser 908, tras la negociación para conseguir los votos que necesitan en Diputados. Y minutos antes de la votación de hoy llegaron a más de 1.000 cargos. ¡ESCÁNDALO!", se quejó la cordobesa Laura Rodríguez Machado (PRO).

Massa confía en el apoyo de Diputados


El presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, se mostró confiado en que la Cámara baja sancionará el proyecto de reforma judicial a pesar que el FdT no tiene quórum propio para aprobarla, y aseguró que el oficialismo está "dispuesto a escuchar, a discutir y a modificar si hace falta" la iniciativa. Massa estimó además que en Diputados, a diferencia del Senado, el debate "será más largo" que la discusión del Senado, debido a que la Cámara alta tiene 72 integrantes y Diputados 257 miembros."

"Estamos abiertos a escuchar, a discutir y a modificar si hace falta. Tenemos que sacarnos todos los prejuicios y hacer todo el esfuerzo: cada vez que nos peguen una cachetada tenemos que poner la otra mejilla", afirmó.