Alejo Milanesi y Juan Pedro Guarino, los dos rugbiers que fueron liberados hace diez días pero continúan imputados en la causa por el crimen de Fernando Báez Sosa en Villa Gesell, se negaron a declarar en una ampliación de sus indagatorias, mientras la fiscal del caso solicitó una extensión de la prisión preventiva para los otros ocho acusados, tras reformularles la acusación y los grados de participación. En tanto, la defensa de los ocho rugbiers detenidos apeló la prisión preventiva dispuesta para todos ellos, por lo que ahora será la Cámara de Apelaciones de Dolores la que deba confirmar o modificar la situación. Acompañados por el abogado Hugo Tomei, Milanesi (19) y Guarino (19) llegaron cerca del mediodía de ayer a Villa Gesell y se dirigieron de inmediato a la sede judicial donde los aguardaba la fiscal Verónica Zamboni, para ampliar la acusación contra ellos. La funcionaria judicial les notificó su nueva imputación como partícipes necesarios por la figura de "homicidio doblemente agravado, por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas" del que fue víctima el joven Báez Sosa.