La bienvenida. Macri y su esposa, Juliana Awada, reciben el saludo del viceministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Sergeyá Ryabkov y del embajador ruso en la Argentina, Víctor Koronelli.

El presidente Mauricio Macri llegó ayer a Moscú, donde hoy se reunirá con su colega ruso, Vladímir Putin, y buscará atraer grandes inversiones, además de fortalecer el comercio bilateral.

Se trata de la primera visita a Rusia de Macri, cuya llegada a la presidencia de Argentina hizo temer un enfriamiento de las estrechas relaciones que el Kremlin mantuvo con su predecesora, Cristina Fernández de Kirchner. Entonces se firmaron varios documentos referentes al desarrollo de la cooperación económica, militar y cultural, además de un Acuerdo de Asociación Estratégica entre Moscú y Buenos Aires, pero los temores no se materializaron y ambos países han logrado mantener las relaciones al mismo nivel.

"En el momento actual de las sanciones europeas (a Rusia), el empresario y aficionado al fútbol Macri puede convertirse en uno de los socios importantes de Putin en la arena internacional", escribía ayer el diario digital "Gazeta.ru".

Macri comenzará su agenda hoy martes con un desayuno con inversores en un céntrico hotel de la capital, empresarios de sectores como el petróleo y gas, el bancario, la energía nuclear o los fertilizantes.

En el encuentro tomarán parte directivos de grandes empresas como las petroleras Gazprom y Lukoil, el banco Gazprombank, Phosagro (Agroquímica), Rosatom (agencia de energía nuclear), Sinara (Inversiones), Uralkali (fertilizantes), Vnesheconombank (Banco de Desarrollo) y Biocad (de Biotecnología).

También asistirán representantes de Mail.Ru y Yandex, gigantes de Internet, de los ferrocarriles rusos, el banco Vtb, Russian Copper Co. (cobre), Transmashholding (ferroviario), y Softline (de tecnología de la información).

A continuación, el mandatario acudirá a la inauguración de la plaza República Argentina acompañado de su esposa, Juliana Awada, en el céntrico distrito de Yakimanka y muy cerca de la embajada argentina.

Un gesto de reciprocidad ruso tras la inauguración el pasado año en Buenos Aires de la plaza Federación de Rusia, en el barrio de Belgrano. Y como es costumbre en todos los jefes de Estado que visitan Moscú, Macri hará una ofrenda floral al monumento al Soldado Desconocido, dedicado a los combatientes caídos en la II Guerra Mundial.

Por la tarde hora de Moscú (11 de Argentina) tendrá lugar el encuentro con Putin en el Palacio del Kremlin, con quien abordará un amplio abanico de asuntos de la agenda bilateral e internacional, en momentos en que Argentina preside el G20. Se espera que Macri agradezca a su par ruso la ayuda que prestó este país en la búsqueda del submarino ARA San Juan, aún desaparecido con 44 tripulantes a bordo.

Putin y Macri se vieron personalmente por primera vez en septiembre de 2016, durante una cumbre del G20 en China. Allí, ambos abordaron el intercambio de hidrocarburos e inversiones rusas en proyectos energéticos de Argentina a cambio de incrementar las exportaciones de carne a Rusia, aprovechando el vacío dejado por los productos europeos.

Se da por hecho que Putin reiterará la invitación a Macri para que asista a la inauguración del Mundial de fútbol en Rusia. Tras su visita a Moscú, el presidente argentino viajará a Zúrich para continuar su gira europea mañana en el Foro de Davos (Suiza) y Francia después.

Una visita "cálida" con 12 grados bajo cero

El presidente Mauricio Macri expresó su deseo de que sea fructífera la visita a Rusia que inició ayer e hizo votos para que se puedan "abrir campos de cooperación" entre ambas naciones, apenas aterrizó su avión en uno de los aeropuertos internacionales de Moscú, donde la temperatura marcaba 12 grados bajo cero.

"Espero que sea una cálida visita donde podamos abrir campos de cooperación con los rusos", dijo el mandatario en un mensaje a través de la red Telegram que grabó apenas aterrizado en el aeropuerto internacional de Moscú-Vnukovo, distante 28 kilómetros al sudoeste del centro de la ciudad. En el video, que lo toma desde un cercano primer plano antes de bajar del avión, el Jefe de Estado contó que hacía mucho frío, al hacer un juego de palabras augurando una "cálida visita" a ese país. Luego, Macri tomó desde la ventanilla del avión la imagen de la pista del aeropuerto Moscú-Vnukovo, donde se veía a la guardia militar rusa que esperaba formada al mandatario argentino para ofrecerle sus honores. Macri llegó a Moscú luego de casi 20 horas de viaje, con una escala en Frankfurt (Alemania).