Diputados oficialistas del Frente de Todos presentaron ayer el proyecto de ley que propone crear, por única vez, un impuesto a los patrimonios que superen los 200 millones de pesos, a fin de reforzar la recaudación fiscal tras la fuerte caída por la crisis económica generada por coronavirus.

Mediante este tributo, el oficialismo calcula que se podrán recaudar unos 300.000 millones de pesos, que serán invertidos en obras públicas, mejora del sistema de salud, apoyo a las pymes y programas sociales.

De acuerdo con el cronograma diseñado por el oficialismo, la intención es comenzar a debatir el proyecto la semana próxima en comisión, según se acordó ayer en una reunión del bloque del FDT que encabezó el diputado nacional Máximo Kirchner.

El texto, que ingresó por Mesa de Entradas y ahora debe ser girado a las comisiones que lo estudiarán, fue firmado por Máximo Kirchner, José Luis Gioja, Hugo Yasky, Itaí Hagman, Fernanda Vallejos, Juan Carlos Alderete, Leonardo Grosso, Lucía Corpacci, Ariel Rauschenberger, Gabriela Cerruti, Alicia Aparicio, Elda Pertile, Marcelo Casaretto y Martín Soria.

De acuerdo con la iniciativa, las personas que tengan más de 200 millones de pesos pagarán una tasa del 2% anual y ese porcentaje será progresivo, con un tope del 3,5%.

Para su estimación, se tomarán como base los bienes personales declarados hasta marzo de este año. Según estimaron desde la bancada oficialista, "se recaudarían aproximadamente 300.000 millones de pesos". Fuentes oficiales explicaron que serían alcanzadas unas 12 mil personas.

Agregaron que lo recaudado se destinará a "comprar equipamiento de salud para atender la pandemia; apoyar a las pymes con subsidios y créditos".

El proyecto tendría la siguiente escala de alícuota según el patrimonio declarado hasta el 31 de diciembre de 2019: 2% para ente $200-$300 millones; 2,25% hasta $400 millones; 2,75% hasta $600 millones; 3% hasta $800 millones; 3,25% hasta $1.500 millones; y 3,5% para más de $3.000 millones. Según los cálculos realizados, alrededor de la mitad de las personas alcanzadas por este aporte tienen entre $200 a $400 millones.

El impuesto a las riquezas y grandes fortunas sostiene que por el total de bienes en el exterior las personas humanas tributarán un recargo del 50% sobre la alícuota que le correspondería. Pero si el contribuyente trae el 30% de sus tenencias financieras que tienen declaradas en el exterior, la sobre tasa se elimina y paga por todo como si lo tuvieran en el país.

Según se estableció, de los fondos recaudados habrá un 20% destinado a la compra y/o elaboración de equipamiento e insumos críticos para la emergencia sanitaria. También, se contemplará un 15% para habitantes de barrios populares en proceso de integración urbana, y un 25% para programas de exploración y desarrollo de gas natural a través de Enarsa (deberá reinvertir las utilidades en nuevos proyectos) que deberá coordinarlo con YPF. Otra parte de lo recaudado será para financiar el relanzamiento del plan Progresar para que las personas jóvenes puedan seguir estudiando.

Al tratarse de una iniciativa impositiva, requiere para su aprobación de mayorías especiales, es decir 129 votos en Diputados.

"Contra nadie"

El presidente del bloque de diputados nacionales del Frente de Todos, Máximo Kirchner, señaló que el proyecto de ley de Aporte Solidario y Extraordinario, que busca gravar por única vez a las grandes fortunas, "no es en contra de ningún argentino ni ninguna argentina, sino a favor del conjunto".