La joven de 24 años que acusó a cuatro jugadores de Vélez Sarsfield de haberla violada en grupo en una habitación de hotel de San Miguel de Tucumán dio su testimonio en la Justicia por tercera vez en lo que va del caso este lunes. Luego de que la chica declarara en Cámara Gesell, los acusados quedaron aprehendidos por pedido de la fiscal, según confiaron fuentes del caso a Infobae.

Los jugadores de Vélez imputados son Sebastián Sosa, Braian Cufré, Abiel Osorio y José Florentín. Y aún no están formalmente detenidos, porque “resta la decisión del juzgado que interviene en la causa sobre si los deja presos o no luego del pedido de la fiscal”, explicaron las fuentes consultadas.

La declaración de la víctima fue una prueba crucial en el expediente que instruye la fiscal María Eugenia Posse y se realizó ante psicólogas especializadas, en el contexto de una cámara Gesell.

“Luego de la cámara Gesell, la fiscal llamó a todas las partes a su despacho y les preguntó a los defensores si los acusados estaban dispuestos a entregar sus celulares y hacerse pericias de ADN, dijeron que sí; y después comunicó que los cuatro iban a quedar aprehendidos”, explicó Juan Robles, uno de los representantes legales de la víctima.

Su colega, Patricia Neme, aclaró ante las cámaras de TN que, ahora, “la Justicia tiene 48 horas para hacer una audiencia de control de garantías donde se formularán los cargos y se sabrá cómo sigue el proceso”.

¿Qué significa esto? En Tucumán, ante el pedido de la fiscal los acusados quedan detenidos inmediatamente, pero en la audiencia de este miércoles, si el juez dice que no corresponde la detención serán inmediatamente liberados.

Hay que recordar que la semana pasada, la fiscal Posse les había prohibido la salida del país a Sosa, Cufré, Osorio y Florentín por un plazo de 90 días. La próxima prueba de interés que se espera en el expediente es el análisis toxicológico a la sangre y orina que se le hizo a la denunciante, ya que aseguró haber consumido una bebida antes del ataque que podría haberla drogado. Los resultados, según las mismas fuentes, “estarán disponibles en 20 días”.

La denuncia se produjo casi dos semanas atrás cuando la víctima, una periodista deportiva, se presentó en una comisaría de San Miguel de Tucumán para denunciar que había sido violada por Sosa, Cufré, Osorio y Florentín, luego del encuentro que había disputado el club de Liniers frente a Atlético Tucumán por el campeonato local.

El caso

Tras el partido entre Vélez y Atlético Tucumán, la víctima denunció que fue invitada al hotel donde se concentraba el equipo de Liniers. Según sus dichos, fue Sosa quien le pidió que vaya tras una serie de mensajes de Instagram.

Al llegar a la habitación 407, la chica se encontró al jugador. Poco después, se sumaron Osorio, Cufré y Florentín. “Con los cuales comenzó a compartir unas latas de cerveza, luego le ofrecieron fernet y, después de tomar unos tragos, comenzó a sentirse mal, muy mareada, por lo que se recostó en una de las camas, como adormecida”, de acuerdo al reporte inicial.

En ese momento, según su relato, habría ocurrido el ataque. La joven dejó el hotel en un auto de aplicación, que pidió ella misma. Tres días más tarde, se presentó ante la División Delitos contra las Personas de la Policía de Tucumán para realizar la denuncia. Allí, entregó la ropa que usó aquella noche.

La fiscalía ordenó las pericias de rigor a la víctima, así como el relevo de las cámaras de seguridad y el análisis de las prendas. Poco después, los jugadores fueron separados preventivamente del plantel del club de Liniers.

En su segundo testimonio, al que accedió Infobae, la denunciante aseveró: “Sosa me empezó a escribir, diciéndome que tenía la noche libre y preguntándome si quería que tomemos algo. Yo acepté. Me preguntó si tenía alguna amiga para invitar, pero le dije que no y él me dijo que estaba con otros compañeros Yo le respondí, textualmente: ‘Mientras no se desubiquen, no hay problema’. Tipo 22, Sosa me dijo que vaya al hotel Hilton ubicado en Piedras y Miguel Lillo. Puntualmente, a la habitación 407″.

En el hotel, “me ofrecieron dos latas de cerveza y, luego, me preguntaron si yo hacía tríos o si estaba con mujeres. Les respondí que no, que no me atraía y que siempre que estaba con alguien era sólo entre dos. En ese momento, me ofrecieron fernet en un termo Stanley color blanco”, remarcó.