Todavía por el rechazo del Senado al mega DNU 70/2023 que desregula la economía el Gobierno pisó el acelerador y activó una serie de reuniones con los bloques opositores más dialoguistas intentando aceitar y encarrilar la discusión por la nueva Ley de Bases o Ley Ómnibus en busca del consenso que le garantice su aprobación. El avance de esta ley en el Congreso es la base que sustenta la idea del Pacto de Mayo que el presidente Javier Milei propuso a los gobernadores en la apertura de la Asamblea Legislativa el 1 de marzo pasado.

Como es de esperar, los que hicieron punta a la hora de abrir la ronda de reuniones fueron los referentes del Pro, el bloque más cercano al gobierno libertario. A la cita con el ministro del Interior, Guillermo Francos en el Salón de los Escudos acudieron el jefe del bloque en Diputados Cristian y a los diputados Diego , Silvia , José Núñez, Luciano , Silvana y Damián Arabia.

Por la tarde llegó el jefe de bloque radical Rodrigo de , que se alineó con los gobernadores de su partido y se diferenció del titular del partido Martín , que en el Senado votó en contra del . Poner en sintonía a todos los radicales del Congreso no será tarea fácil para el oficialismo ya que después del voto de la interna radical se puso color de hormigas y hay serio riesgo de fractura.

El lunes, Francos recibirá al jefe del bloque Hacemos Coalición Federal Miguel , que lidera un grupo ecléctico de voluntades y que alterna apoyos y rechazos a las medidas de Milei.

Las tres autoridades parlamentarias ya se habían reunido en la previa de la reunión de Francos con gobernadores.

"Nosotros hemos trabajado en forma positiva desde el primer momento para que tanto el DNU como la Ley de Bases sean aprobadas por el Congreso. Esta nueva modificación de la Ley de Bases, que viene del Gobierno hablando con gobernadores, con los presidentes del bloque, hoy tuvo un avance", señaló a la salida de la reunión en la Rosada, su tercera visita en tres semanas.

En Balcarce 50 asumen que el Gobierno tiene mayor predicamento en Diputados que en el Senado. Algunos de los políticos del Ejecutivo confían en que no hay chances de que el DNU se caiga en la Cámara Baja, porque no será tratado a la brevedad o porque la oposición más dura no conseguirá una mayoría.

El rechazo al DNU apenas fue tocado durante el encuentro de Francos con las espadas legislativas de Mauricio Macri y Patricia Bullrich. En la Rosada esperaban un revés, pero siguen creyendo que no debió haberse tratado el proyecto sin pasar por comisión, un tiro por elevación a la vicepresidenta Victoria Villarruel.

En la reunión con Francos, los diputados del Pro sugirieron temas a corregir para llegar al número mágico de 129 diputados que necesita el oficialismo. El bloque amarillo pretende que la nueva fórmula de movilidad que promueve el gobierno incluya una compensación de 20 puntos por los primeros tres meses del año y no 10 puntos como propone Milei en la Ley Bases.

Entre los aliados del Gobierno también creen que será necesario modificar el nuevo piso de Ganancias, que el Gobierno fijó en $1.100.000 para solteros y $1.500.000 para contribuyentes casados. Promueven excepciones de labores sociales, como enfermería, que -apuestan- alcanzaría para sumar más votos radicales. En el Pro no creen que puedan pescar demasiados votos entre los legisladores patagónicos ni el sector mayoritario del bloque que conduce Pichetto. En tanto, los radicales piden que se que se incorpore la reforma laboral a la ley de Bases y que el DNU sea despiece en leyes para su aprobación. 

>> Milei pone en duda el Pacto de Mayo

Después de otro duro traspié en el Congreso el jueves, el presidente Javier Milei aseguró que el rechazo del Decreto de Necesidad y Urgencia 70/2023, "abre dudas" sobre la firma del Pacto de Mayo previsto para el 25 de ese mes en la provincia de Córdoba.

Para el mandatario, el DNU no es inconstitucional y la votación en la Cámara de Senadores "deja en evidencia que hay gente más preocupada en mantener sus privilegios de casta que por sacar a la Argentina adelante".

"El DNU sigue vigente", se vanaglorió al tiempo que señaló que su rechazo como la potencial caída de la Ley Ómnibus "abren dudas" sobre el acuerdo entre la Nación y los gobernadores conocido como Pacto de Mayo.

"Cuando plantee el discurso de la Asamblea Legislativa, básicamente dije que si quieren confrontar habrá confrontación. Hay algunos que han decidido el camino de la confrontación. Estaba dentro de los resultados esperables", sostuvo en declaraciones radiales. Destacó que lograron 25 votos para avalar la medida.

En la cuerda floja. Lousteau fue cuestionado por los propios correligionarios por rechazar el DNU. Su liderazgo quedó desdibujado y bajo riesgo.

> Gobernadores de la UCR se despegan de Lousteau

La frágil relación de unidad que intentan sostener puertas adentro los líderes de la UCR sufrió ayer un duro embate: después del voto a favor del rechazo del DNU 70/2023 en el Senado por parte del presidente del "Comité nacional de la UCR, el senador Martín Lousteau, activó un comunicado de gobernadores y los jefes de bloque del radicalismo para despegarse del voto del jefe partidario y pidieron "un partido más moderno".

"Queremos un cambio en el país y trabajamos para construir un partido moderno, que acompañe las reformas estructurales que necesita hoy Argentina", señalaron a través de un comunicado al tiempo que expresaron su apoyo al orden de las cuentas públicas y el equilibrio fiscal.

El documento lo firmaron Alfredo Cornejo (Mendoza), Carlos Sadir (Jujuy), Gustavo Valdés (Corrientes) y Leandro Zdero (Chaco) y los jefes de bloque radicales, Eduardo Vischi (Senado) y Rodrigo De Loredo (Diputados).

"La Argentina necesita de acuerdos y consensos que nos permitan sacar a nuestro país del estancamiento y decadencia que nos sometió el kirchnerismo durante años. Respetamos el camino que eligieron los argentinos en las elecciones del año pasado con un claro mandato de cambio y vamos a contribuir con las herramientas justas y necesarias que el Gobierno necesita para avanzar en su plan de gestión", enfatizaron.

Asimismo, respaldaron las discusiones y reformas del Gobierno de Javier Milei "para sacar a flote a nuestra sociedad, ahogada con la inflación, la presión impositiva y la pobreza a la que nos fue sometiendo el kirchnerismo con un modelo negacionista, discriminador y corrupto".

A pesar del apoyo, alertaron: "Pero también abogamos para que estas reformas sean fruto del consenso y, por eso, el Ejecutivo Nacional no debe tentarse con prolongar la narrativa electoral. Somos muchos los que queremos cambios profundos en la Argentina".

"Desde el lugar que ocupa cada uno, debemos contribuir con acciones conducentes a lograr los acuerdos que ayuden a sacar a nuestra sociedad de la profunda crisis que está atravesando", subrayaron.

Los cuatro gobernadores plantearon también la necesidad de un cambio cultural que "promueva un Estado inteligente, eficaz y simplificado, que se enfoque en las principales tareas como seguridad, educación, salud, defensa y justicia".

Ante la ola de críticas de propios y extraños, Lousteau argumentó que votó negativo en el tratamiento del DNU de Javier Milei porque "es inconstitucional", al mismo tiempo que indicó que "el Gobierno quiere actuar por fuera de la legalidad".