La empresa estatal israelí Mekorot trabajará en conjunto con la provincia de San Juan durante 18 meses con el objetivo de trazar un plan maestro a 30 años para administrar de forma eficiente el escaso recurso hídrico. Esta tarea se materializó ayer en la firma del convenio con la empresa de agua israelí en la que participó el gobernador Sergio Uñac en el Consejo Federal de Inversiones (CFI), en Buenos Aires. De la firma también fue parte Mendoza. Ambas provincias padecen una fuerte sequía y por eso decidieron hacer un abordaje conjunto con la empresa israelí que es experta en soluciones de crisis hídrica. El CFI se hará cargo de financiar los costos de la consultoría de Mekorot.

En el acto participaron además el ministro del Interior, Eduardo Wado De Pedro; el gobernador de Mendoza, Rodolfo Suárez; el embajador de Israel en Argentina, Eyal Sela; el secretario general del Consejo Federal de Inversiones, Ignacio Lamothe, y el coordinador de Proyectos Especiales Internacionales de Mekorot, Dr. Diego Berger, entre otras autoridades.

Mekorot dispondrá un coordinador general para ambas provincias, aunque cada jurisdicción desarrollará planes distintos. El gobernador Uñac, en su discurso, destacó los resultados superlativos de la misión argentina en Israel realizada en abril y señaló que el buen manejo del agua es imprescindible dado el contexto actual y la diversificación de la matriz económica que lleva adelante San Juan.

El convenio incluye la consultoría para la elaboración del plan en la que participarán profesionales y técnicos sanjuaninos. Hoy llegará a la provincia el coordinador de Proyectos Especiales Internacionales de Mekorot, Dr. Diego Berger, quien participará de su primer encuentro con el equipo técnico local.

La propuesta de Israel consta de 6 etapas: el estudio del estado actual del sector hídrico y balance hídrico, el potencial y proyecciones de los recursos hídricos (agua subterránea y agua superficial) 2030-2050, y las proyecciones de la demanda de agua 2030-2050. Luego se analizarán los conceptos y normativas de la economía del agua, se hará un balance de agua y sistemas alternativos de suministro, y por último, un análisis económico del esquema de suministro de agua aprobado.