El recorrido del bitcoin y las criptomonedas en Argentina frente a las plataformas de trading y exchange.

Hay una moneda que hace 13 años todavía no existía y de la que hoy tendrías que dar hasta 60 mil dólares a cambio de una. No está respaldada por ningún banco central en el mundo y sin embargo se mueve por todo el planeta en incontables transacciones por segundo. Existe solo en el internet, pero sus efectos en el mundo real son cada vez más tangibles. Su nombre es bitcoin y desde que nació, en 2008, comenzó una revolución de la que apenas hemos presenciado el inicio.

El bitcoin no está atado a países, y prácticamente desde su creación, cualquier usuario de internet con los debidos conocimientos informáticos podía comprar esta criptomoneda. Pero en Argentina, como en varios países de Latinoamérica, el bitcoin, el Ethereum y otras criptomonedas populares comenzaron a hacerse hueco en la región con la llegada de plataformas locales de trading y exchange de activos digitales.

Una de las primeras plataformas para exchange de criptomonedas en el país fue Argenbtc, que apareció en 2014. A esta se han sumado varias más, como Ripio o SatoshiTango, así como otras aplicaciones surgidas en países latinoamericanos, como Buda, de Chile; y Bitso, de México.

Pero a medida que la demanda aumenta, a la Argentina también han llegado nuevas opciones de plataformas con presencia internacional, y cada vez más sofisticadas. Bingbon, por ejemplo, apareció en Singapur en 2018 y creció rápidamente debido a funciones muy específicas como Copy Trade, que permite a cualquiera copiar los movimientos de traders profesionales de forma automatizada. De acuerdo con la empresa, hasta el 80% de sus usuarios participan en esta herramienta, que facilita que usuarios sin experiencia incursionen en el trading y generen ganancias.

Lo que todas las aplicaciones tienen en común es que se han desarrollado por el interés de cada vez más personas por las criptomonedas como medida de ahorro, especulación o como respaldo contra la inflación.

El bitcoin es la moneda digital más cara, cuyo precio en marzo superó los 60 mil dólares, y cotiza los 8 millones de pesos en varios sitios de exchange. La espectacular alza en sus precios vino a traer una oleada nueva de inversores que no habían considerado esta criptomoneda, pero así la moda atrajo a muchos, otros ven en las criptomonedas una alternativa al dólar para proteger sus ingresos.

El camino para la regulación en la Argentina

Las criptomonedas tomaron por asalto los bancos tradicionales y los gobiernos de países de todo el mundo, que no vieron venir el impacto que esta moneda descentralizada tendría en la economía.

En la Argentina, el bitcoin y otras monedas digitales fueron incluidas en 2014 dentro de la Resolución 300/2014 de la Unidad de Inteligencia Financiera, el organismo gubernamental que previene delitos financieros. Según este documento, las define como “monedas virtuales” y son representaciones digitales de valor que pueden ser objeto de comercio digital, intercambio o reserva de valor. También hace hincapié en que no son respaldadas o emitidas por ningún país o jurisdicción.

Esta primera consideración no impidió que las criptomonedas ganaran popularidad en el país, y aplicaciones locales e internacionales crecieron junto con el interés de los argentinos. En 2018, la Reforma Tributaria comenzó a cobrar impuesto a las ganancias sobre monedas digitales, que significa pagar una alícuota que regularmente es del 15%. Esta regulación ha sido objeto de críticas por su ambigüedad, pues establece impuestos distintos si las ganancias provienen de monedas argentinas o de otro país, y si son emitidas en monedas extranjeras. Las criptomonedas no son “emitidas” tal cual ni tienen valor por sí mismas, así que eso ha complicado su regularización.

Además, con la resolución general 4614/2019, las empresas argentinas que ofrecen servicio de bróker o trading de criptomonedas deben informar sobre los titulares de cuentas, montos y saldos directamente a la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP). Esta es otra razón por la que plataformas como Bingbon han ganado usuarios en la Argentina, pues al ser plataforma internacional no está contemplada en la regulación.

El mes pasado se discutieron en Córdoba dos proyectos de ley para regular las criptomonedas en esa provincia, que incluyó un impuesto de 0.25% para los usuarios que venden porque reciben pagos por servicios comerciales, y de 4.75% para las empresas de exchange y trading. Los traders, por su parte, pagarán 6.5% de impuestos.

Pero, aunque esta regulación es local, hay expectativas de que pueda extenderse a otras provincias argentinas próximamente.

La resistencia: criptomonedas contra la inflación

Venezuela y Colombia fueron los dos países latinoamericanos que más adoptaron criptomonedas en 2020, según un análisis de Chainalysis Market. Pero Argentina está en el lugar 28 del mundo, arriba de México, Ecuador o Chile.

Pese a los impuestos y la regulación imprecisa, los argentinos están comprando más criptomonedas que nunca, sobre todo como medida para protegerse de la inflación. Actualmente hay un impuesto de 35% a la compra de dólares estadounidenses, y con un límite de $200 por mes. Y mientras la salida tradicional era optar por el dólar blue, que se vende en el mercado negro con una cotización hasta 50% menor que la de los precios oficiales, muchos argentinos han encontrado en las monedas digitales una alternativa.

En diciembre del año pasado, el sitio CoinDesk consideró que la combinación entre la deuda extranjera y la inflación, junto con el impacto de la pandemia de COVID-19 y las restricciones gubernamentales para comprar dólares, han convertido a la Argentina en un caso único en el mundo en adopción de criptomonedas.

Los críticos de estos activos normalmente señalan la volatilidad de los precios del bitcoin, pero en este mercado, cada vez más sofisticado, ya existen stablecoins, monedas que, pese a ser digitales, tienen respaldo en el dólar para mantener su precio constante. Destaca el caso del USDC, o USD Coin, una moneda impulsada por plataformas como Coinbase o Bingbon que tiene el mismo valor que el dólar.

Con una oferta cada vez mayor de plataformas para hacer exchange de criptomonedas, regulaciones que podrían impactar el ecosistema y cada vez más argentinos interesados en su intercambio, el mercado de las criptomonedas en la Argentina seguirá dando de qué hablar en 2021.