La faena de cabezas de ganado cayó 11,2% interanual en el segundo trimestre del año y el consumo per cápita descendió al nivel más bajo de la historia, según un informe elaborado por la Fundación Mediterránea.

El consumo per cápita en los primeros cinco meses del 2021 se ubica apenas en 45,3 kilos per cápita.

El economista Nicolás Torre, del instituto IERAL de la entidad, explicó que considerando la faena acumulada para 2021, se observa una "desmejora significativa de la actividad para la industria frigorífica ubicada en el interior del país, en Córdoba, Cuyo y Santa Fe".

Durante 2020 se perdieron 560 mil vacas vientre, con una baja del 2,4%, lo que se tradujo en un factor alcista del precio de la hacienda durante los últimos trimestres, y por consiguiente de la carne bovina al mostrador del 75% entre mayo 2020-2021.

El salario subió 38% durante similar período, lo que se tradujo en una marcada caída del consumo per cápita de carne bovina, estimado en 45,3 kg por habitante, para primeros cinco meses de 2021, según el análisis del especialista. 

Así, en un contexto de cambiantes políticas sectoriales para la cadena bovina, frente a cierre y posterior apertura parcial de las exportaciones, la actividad de la industria frigorífica exhibe una marcada contracción en relación a igual período del año pasado, si se comparan datos de abril-mayo de 2021 contra mismos meses de 2020. 

Según datos publicados por la Dirección Nacional de Control Comercial Agropecuario (DNCCA), la industria registró durante Abril-Mayo del 2021 un nivel de faena (cabezas) 11,2% inferior igual periodo de 2020. 

Esta menor actividad estaría explicada, en principio, por la conjunción simultánea de la retracción de la oferta de hacienda y una preocupante tendencia negativa observada en la dotación de vientres: se perdieron 560 mil vacas entre diciembre de 2019 y Dic 2020, el 2,4%.

El otro factor negativo es el bajo poder adquisitivo de los salarios en relación a la carne durante el avance de 2021.

La carne de bovina destinada al mercado interno aumentó en precio un 75% durante los últimos 12 meses (mayo/mayo), de $385 a $673 el kilo, considerando un conjunto de seis cortes bovinos: asado, bife angosto, carne picada, cuadril, nalga y paleta. 

En igual período, el salario de un trabajador registrado del sector privado (desestacionalizado) aumentó aproximadamente un 38%, para rondar los $79.000 a mayo de 2021. 

Este monto permitió adquirir en mayo aproximadamente 117 kilos de carne bovina: conjunto de seis cortes.

"Si se compara este volumen con el de un año atrás (149 kilos), se concluye que la pérdida de poder adquisitivo del salario registrado con relación a kilogramos de carne bovina es del 21%", dice el análisis.

Fuente: Telefé