El mes de febrero y los primeros días de marzo están siendo complicados para los estacioneros de la provincia que tienen problemas para abastecer a sus clientes e inclusive algunas bocas de expendio se quedan sin combustible por varios días, según afirman desde la Cámara de Expendedores de Combustibles de la provincia. La situación se complica en las estaciones de servicio más alejadas, que en algunos casos dejan sin un servicio vital a la zona. Los motivos que esgrimen desde la Cámara tienen base, por un lado en la mayor demanda de la plaza local y por otro, en la especulación de algunas compañías que no cumplen con el cupo en muchos casos.

"Estamos atravesando una situación preocupante que se evidenció en febrero y pasa en general en todo el país (ver apartado). El problema que tenemos es que cuando se queda una estación de servicio céntrica sin naftas, la gente va a la que está más cerca y carga, pero cuando eso sucede en 25 de Mayo, en Sarmiento o en cualquier lugar alejado la cuestión se complica", señaló el presidente de la Cámara de Expendedores de la provincia, Eduardo Margarit.

Los estacioneros optan por privilegiar a los clientes cuando el volumen de combustible no es el suficiente y otros ponen cupos en dinero, como para que alcance para todos.

Según datos que manejan los expendedores de combustibles locales, en el 2009 la demanda bajó un 20% con respecto al 2008, pero en este inicio del 2010 el consumo interno a vuelto a repuntar a volúmenes cercanos a los de dos años atrás, pero manteniéndose los mismos cupos asignados para San Juan. La compañía que más demanda tiene en la provincia es YPF, porque sus valores son más baratos que las otras compañías al estar regulados por el estado.

En el caso de la estación de servicio YPF de 9 de Julio, aseguraron que "a veces le tenés que poner un limite a los clientes, porque sino le terminas entregando a pocos todo el combustible y podes dejar sin servicio a todo un departamento".

En el caso del departamento Jáchal, dijeron desde el Automóvil Club Argentino que "el expendio es normal y en ningún momento hubo desabastecimiento, por ahora la venta es libre y sin ningún tipo de cupo" y situación similar admitieron tener en la estación de servicio Juan José, de Media Agua.

Panorama similar se refleja en una estación de "bandera blanca" -no tiene contrato de exclusividad con ninguna compañía- donde una encargada dijo que "a veces tenemos nafta y otras no, y cuando hay vendemos todo, pero ocurre que en varios días nos quedamos sin nada".

Por su parte, Bernardo Turcumán, estacionero y hombre fuerte de la Cámara, fue más duro y apuntó a las compañías: "Con la situación fiscal que tienen las compañías en la Argentina no les conviene vender combustible y por eso retasean. El petróleo es un recurso no renovable y nadie lo quiere mal vender, pero otra es la realidad del empresario, del dueño de una estación de servicio, que lo que quiere es vender y ganar en definitiva plata, porque esto es un negocio".