La paritarias vitivinícolas para definir los sueldos de los empleados de viña y bodega, se traza en medio de un abismo entre lo que pretende el gremio y lo que ofrecen las cámaras empresarias: Por un lado, la Federación de Obreros y Empleados Vitivinícolas y Afines (FOEVA) pide elevar el sueldo básico del trabajador a $4.000, un 85% más de lo que percibe hoy en día y además solicitaron un premio de $1.000 por única vez, un retroactivo a diciembre de 2010, un doble aguinaldo para ambas categorías a pagar en diciembre de 2011 y un 2% de aporte a la cuota sindical. Pero los empresarios apuestan a un incremento que rondaría los $360 -un 18%-. El martes que viene se reúnen para acercar posiciones y según confiaron a este diario, "a más tardar el 11 de este mes" habría acuerdo. El año pasado, la suba fue del 20%.

"Nosotros tenemos una posición tomada pero no somos necios y vamos a negociar. Creemos que los sueldos de nuestro sector vienen arrastrando un atraso de años y es hora de actualizarlos, porque hemos quedado muy por debajo de otros salarios. Estamos dispuestos a ceder, siempre y cuando de la otra parte haya la misma intención", expresó el dirigente de FOEVA, Carlos Ozán. Por su parte, Sergio Villanueva, gerente de la Unión Vitivinícola Argentina (UVA) y representante del sector empresario, dijo ayer que "personalmente creo que la salida a estas negociaciones va estar por el lado de separar lo que es "actualización del salario" de los otros ítems solicitados". Asimismo, el dirigente explicó que "una vez que se tenga definida la negociación salarial, recién se pondrá en la mesa la discusión para fijar el precio de la gamela". En este sentido, la idea del gremio es ubicar el precio de la gamela por encima de los $2,00 -equivale a 50 centavos más que la vendimia pasada-, aunque Ozán aclaró que "este tema es más flexible, porque si bien queremos tener un parámetro de valores sabemos que el precio de la gamela depende de las condiciones en que estén los parrales y lo engorroso que sea la recolección de la uva, porque hay fincas que por sus características o algún accidente climático, llenar un tacho lleva un buen tiempo".