El ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, señaló hoy la necesidad de “una minería sustentable, con cuidado ambiental mediante la incorporación de las mejores tecnologías y con un Estado presente en la fiscalización”, al participar en el lanzamiento de la Mesa Nacional para el diseño del Plan Estratégico para el Desarrollo Minero Argentino.

En el marco de un encuentro en el que participaron más de una decena de gobernadores y otras autoridades provinciales, representantes gremiales y empresarios, académicos y de entidades de la sociedad civil, Kulfas detalló que para la elaboración de plan se llevarán adelante veinte jornadas de trabajo en las que se recogerán los distintos aportes con el objetivo de lograr una estrategia compartida de “minería inclusiva y sostenible, que capte inversiones y genere divisas”.

“No hay dicotomía entre producción y medio ambiente, aunque se plantean discusiones polarizadas y se abre la famosa grieta, que es uno de los obstáculos para el desarrollo a largo plazo, y aparece gente que impugna la actividad minera desde clichés y falta de conocimientos científicos”, enfatizó el ministro.

Kulfas afirmó que la minería “es parte de la solución al problema de los argentinos, en medio de una crisis muy profunda por la recesión de 2018-19, agravada por la pandemia” de coronavirus.

“El desafío doble es recuperar la economía, como se está logrando, y tener no solo un 2021 de crecimiento, sino pensar el desarrollo productivo para toda la década o más, y tener un sendero de bienestar, empleo y exportaciones”, añadió.

El funcionario confió en que los proyectos mineros harán un aporte para revertir “tres tipos de desigualdades: de ingresos, regionales y de género”, e instó luego al diálogo sobre el tipo de modelo productivo.

A su turno, el secretario de Minería, el sanjuanino Alberto Hensel, resaltó que la actividad sectorial “demanda mucha inversión de largo plazo y alto riesgo”, y recordó que, para la conformación de la Mesa Nacional, recurrieron al "apoyo técnico y financiamiento del BID (Banco Interamericano de Desarrollo) a fin de avanzar en un proceso de planificación que elabore las reglas para los próximos 30 años”.

“Existen distintos modelos para la explotación de los recursos metalíferos y no metalíferos: el chileno, el peruano, el australiano, el canadiense y otros; nosotros apuntamos a un modelo nacional”, dijo Hensel.

En ese marco, el secretario enfatizó que “tenemos que ponernos de acuerdo en los atributos de esta actividad y elaborar un plan estratégico desde donde deben desprenderse las políticas públicas y las herramientas para captar el mayor flujo de inversiones posibles”.

Los trabajos previos, llevados a cabo en los últimos meses en el marco de una mesa facilitadora multisectorial, concluyeron con la elaboración de un documento que promueve “el aprovechamiento responsable de los recursos naturales”, informó la cartera de Desarrollo Productivo.

El documento considera a tal fin “factores clave para el desarrollo sostenible” a las buenas prácticas en materia de innovación, transparencia, participación ciudadana, inclusión social, desarrollo local, cuidado y preservación del medio ambiente y capacitación de las personas.

La minería “debe ser competitiva”, para lo cual tiene que “generar incentivos para que el capital nacional y mundial la elija como destino de inversión", al presentar "costos iguales o inferiores y productividad igual o mayor que otros centros mineros con los que compite en el mundo”, enfatiza la cartera nacional entre los principales lineamientos.

También se alienta la integración de la actividad al aparato productivo, ya que “el desarrollo de la industria nacional y el impulso a las cadenas de valor resultan fundamentales para que la industria minera se convierta en motor de crecimiento y progreso de las comunidades en que se desarrolla”.

Por último, el documento facilitador de la mesa nacional sostiene que la minería “debe convertirse en una industria líder en innovación para la protección ambiental”.

Es decir, “un modelo a seguir para las demás actividades primarias e industriales en términos de uso sostenible de los recursos naturales, participación ciudadana y transparencia", lo cual implicará desafíos vinculados al marco normativo y regulatorio; instrumentos de fiscalización y monitoreo; innovación tecnológica y gestión ambiental.