Con el grueso de la cosecha de uva para vinificar cada vez más cerca, previsto para febrero en San Juan, vuelve el tironeo entre productores y bodegueros por el precio de la uva. Este año los viñateros quieren $25 por el kilo de uvas comunes, argumentando que habrá menos producción, y que el mercado de vinos creció en el 2020. La cifra es más de 3 veces superior a lo que se terminó pagando en en 2020, que fue en promedio $7,50. Desde el sector bodeguero piden cautela y esperar un poco más hasta que se aclare el panorama.

El antecedente es que la cosecha del año pasado fue un 25% inferior a la del 2019, porque se recolectaron 478 millones de kilos. Fueron los peores números de los últimos 24 años en San Juan, una situación ocasionada por la sequía fundamentalmente. Y para este año se espera, al menos, repetir los números del año pasado, si es que no hay menos producción. Es que los productores, por un tema de costos, no pudieron realizaron todas las labores culturales que los parrales necesitan. Y en Mendoza el panorama se complica con fenómenos climáticos, como granizo y las heladas. Todo este combo de factores hace que pueda llegar a faltar uva para satisfacer los mercados ganados, porque el 2020 cerró con crecimiento de ventas tanto de mercado interno como en el sector exportador. Incluso en San Juan se comenta que frente al faltante de uvas creció la cantidad de bodegas mendocinas que demandan uva local.

Así las cosas, por las uvas comunes (blancas y rosadas) los viñateros quieren $25, por las tintas entre $30 a $35 y por las varietales finas, $45. El año pasado, por las tintas, se llegaron a pagar entre $8 a $10 y por las varietales finas entre $10 a $12 pesos.

Para algunos, el planteo de los viñateros es exagerado porque la inflación del 2020 cerró con un 36,1% de suba, pero en el sector se defienden diciendo que el año pasado no cubrieron los costos con lo que cobraron. Y usan de argumento que incluso este año puede llegar a faltar vino para sostener los mercados.

El planteo de los productores incluso ya se dio a conocer al Gobierno provincial, en el ámbito de la Mesa de Consenso Vitivinícola, que encabeza el ministro Andrés Díaz Cano.

Hay que señalar también que hasta hay un sector de los productores que propone que el precio de la uva tenga como referencia al dólar y que, en el caso de operaciones en cuotas, que es lo más común, las actualizaciones se hagan tomando en cuenta la moneda norteamericana. Uno de ellos es Juan José Ramos, de la Asociación de Viñateros Independientes, quien sostuvo que "es la forma de que nuestro producto no pierda valor".

Desde la Cámara de Productores Vitícolas, José "Catuco" Molina dijo que "creo que va a ser un buen año para el productor, pero hay que ver con la contraparte, que es el sector industrial".

Eduardo Garcés, de la Federación de Viñateros, sostuvo que "en la Mesa del Consenso Vitivinícola ya hemos planteado que pedimos $25 por kilo de uva". Y Pablo Martín, de la Mesa Vitícola, recordó que "vamos a enfrentar una cosecha con menor producción sobre todo por el tema hídrico".

Mario Pulenta, que lidera la Cámara de Bodegueros, expresó que "todavía no hay precio para la uva, no hay una referencia concreta para dar. Y lo que hay es mucha incertidumbre".

La situación en Mendoza


Desde la Asociación de Productores Independientes de Mendoza dieron a conocer que habiendo analizado los costos de producción, las exportaciones, las ventas al mercado interno y luego de haber consultado a economistas, es que aconsejan no vender las uvas a un precio menor, en el caso de las uvas mezclas, de 25 centavos de dólar, que a la cotización de estos días representaría unos $23.

Y sobre las condiciones de pago entienden que hay que dejarlas en manos del comprador y vendedor, sin sugerir un plazo mínimo, ni máximo.