En el marco de una cosecha récord de trigo y maíz, y posiblemente de soja, no se puede seguir enfrascados en la idea de que estos productos exportados a granel, son los únicos que contribuyen con las divisas que el país necesita para afrontar la dura crisis económica financiera en la que está inmerso. Es una realidad que la Argentina está exportando porotos en lugar de harina, aceite y biodiesel, cuando se debería aprovechar esta oportunidad para diversificar la producción agropecuaria, posibilitando a todas las regiones del país contar con emprendimientos productivos que ayuden a contrarrestar los alarmantes índices de pobreza.


Con la exportación exclusiva de materia prima a los distintos mercados internacionales, el país se está privando de generar las bases de un esquema productivo que active la industria nacional para hacer frente al elevado índice de desocupación que ya ha alcanzado el 9 por ciento.


Una de las alternativas que está ofreciendo un buen panorama de desarrollo es el de la producción de biocombustibles derivados de varios productos agrícolas con buenos rindes en el país. El biodiesel argentino tiene muy buena aceptación en todo el mundo, pero hay que estar atentos a ciertas políticas comerciales, como la implementada por Estados Unidos, que ha encontrado la forma de ocupar el lugar que tenía Argentina como principal abastecedor mundial de ese combustible.


Por otra parte hay que evitar que suceda lo ocurrido al grupo Los Balcanes, de la provincia de Tucumán, que posee cuatro ingenios, una productora de alcohol de caña y una generadora de energía, que no están funcionando en la medida de lo esperado. La actual titular del grupo, la descendiente de croatas Catalina Lonac, sostiene que todo lo que se había logrado en materia de crecimiento en su Tucumán natal y los proyectos de producir biodiesel se están diluyendo, a tal punto que han salido a buscar socios para mantener las empresas.


Este cuadro de situación contrasta con algunas noticias como la de la provincia de Santa Fe donde el transporte público está funcionando con ese combustible, que resulta más económico y menos contaminante. Y la creación de la Liga de Provincias Bioenergéticas (Córdoba, Santa Fe, Tucumán, Salta, Santiago del Estero, Entre Ríos, Jujuy, Buenos Aires y CABA (Ciudad Autónoma de Buenos Aires), en su papel de gran consumidora) que está trabajando en la explotación y promoción de este combustible en niveles que se quieren equipara a la productividad que tendrá el yacimiento Vaca Muerta.