Un cordero de dos cabezas y tres orejas nació el último miércoles en una chacra de la ciudad rionegrina de Coronel Belisle.

Según comentó el propietario del lugar, Juan Carlos Sarasola, él notó que el animal se tiraba al piso y se levantaba quejándose de un dolor inaguantable.

"Siempre aparecen las dos patitas y el hocico, pero no pasaba nada y no sabíamos qué hacer. Pensamos que la cría estaba muerta o que eran mellizos, por lo que el trabajo era más difícil", afirmó.

Según relató el hombre, al ver que pasaban las horas y el parto no terminaba, le pidió a uno de sus empleados que con los cuidados pertinentes, la asistiera.

"Se puso los guantes, metió las manos e intentó acomodar al corderito. Ahí me dijo que tenía dos cabezas y tres orejas. Yo pensé que estaba loco", confesó.

"Al rato escuché al empleado a los gritos porque había logrado sacar al cordero que, de hecho, tenía dos cabezas. El tamaño del cuerpo era normal; tenía cuello y la cabeza principal, pero de la orilla le salía otra. La primera tenía dos orejas, pero la segunda sólo una. Las dos tenían ojos, boca, lengua y ambas balaban. Lo que sí notamos es que sólo la cabeza principal tomaba leche, pero le salía por la nariz de la otra", relató el rionegrino.

Una vez que estabilizaron al animal, le dieron leche y calor y le armaron un lugar especial para que pudiera descansar al lado de la estufa.

Esa situación se repitió hasta que el cordero no aguantó más y falleció.