Hace unos días que ya se hizo visible la lluvia de estrellas, pero la próxima semana estará la posibilidad de disfrutar este fenómeno astrológico en su mayor despliegue. Un espectáculo imponente, donde llegarán a verse 60 meteoros por hora.

Hasta el 17 de diciembre las Gemínidas estarán produciendo este evento, que será visible desde todo el mundo, pero con mayor nitidez en el hemisferio norte. Muchos astrónomos las llaman: “La madre de todas las lluvias”, porque se ven más cantidad de meteoros por hora.

Para poder apreciarlas bien, hay que buscar un lugar descampado, sin contaminación lumínica: las luces de la ciudad hacen más complicado distinguir el cielo nocturno. No es necesario usar binoculares ni telescopios, pero sí hay que darle tiempo a la vista a que se acostumbre a la oscuridad, para que comience a ver mejor las estrellas. Y, por supuesto, esperar que haya buen tiempo, y cielo despejado: las nubes pueden arruinar todo el espectáculo.

El mejor momento para ver esta lluvia de estrellas es durante la noche del domingo 13 de diciembre y la del lunes 14 de diciembre. Y el pico de mayor frecuencia será el 14 a las 0:48h UTC. 

Este evento astronómico se produce siempre a mediados de diciembre, cuando la órbita de la Tierra atraviesa una región con abundancia de restos de arena y polvo de un asteroide. Se trata del 3200 Phaethon, una roca espacial de 5 kilómetros de diámetro, que suelta estos escombros a su paso por los planetas interiores del Sistema Solar.

Al entrar en contacto con la atmósfera, esos restos producen destellos brillantes, que se visualizan como una lluvia de estrellas fugaces, que recorren el cielo a 35 kilómetros por segundo, y luego desaparecen.