Con la obra Médico a palos, el elenco "Escuela Argentina de Teatro Antropológico" (E.A.T.A) vuelve a escena pero con doble desafío, actuar al aire libre y en el anfiteatro del Auditorio Juan Victoria. Será mañana, 22.30, con entrada libre y gratuita. 


Bajo dirección de Marianela Flavia Domínguez la pieza saldrá de su escenario habitual que es la Biblioteca Franklin para ofrecer nuevamente esta pieza de Molière en versión de Fernández de Moratín en este nuevo espacio.


"Es una novedad para nosotros, siempre la hemos hecho en la sala de Biblioteca Franklin que es donde fue creada y es la primera vez que la estamos haciendo al aire libre" dijo a DIARIO DE CUYO Domínguez, a cargo actualmente de este elenco de larga trayectoria, conformado por el director teatral Jorge Aimetta, fallecido en 2021.


"La adaptación fue pensada desde un principio para reconocer el espacio y de pensar todas estas variantes que podríamos tener al hacerla al aire libre y bueno, nos ganó en la balanza todas estas posibilidades bonitas que nos entusiasman también de tener al público quizás a otra distancia y de sentir otra percepción con respecto al espacio y al sonido" dijo y es que Domínguez confiesa que tenía sus pruritos sobre sacrificar el tipo de montaje que tenían en su lugar habitual, pero aseguró que descubrió que podía replicar en el anfiteatro del Auditorio condiciones de un teatro cerrado, aún teniendo que enfrentarse a la presencia de viento.


"Como directora tomé la decisión de que la obra no se iba a sacar de la sala para cuidar los recursos técnicos que tenía y además para hacer de que los espectadores y espectadoras vayan al teatro, que tiene una connotación muy importante para la memoria, además uno disfruta y aprende cómo es toda esa rutina de llegar, elegir tu espacio, ver desde dónde te sentás y en situación de empezar a afinar sus sentidos para lo que va a observar; y cuando estuvo esta posibilidad del anfiteatro me di cuenta de que no se perdía esa virtud que se da en el teatro y además que contaba con la posibilidad de los recursos técnicos" aseguró Domínguez, que hizo la salvedad de que si bien no hay parrilla de luces como en una sala de teatro, sí hay "otras estructuras con las que se va a resolver la puesta lumínica".


Cómo se iba a escuchar no era un tema menor a resolver y la directora explicó que descubrió que el lugar "tiene muy buena acústica, el sonido es muy claro". Por otro lado dijo que como son "actores y actrices profesionales y muy entrenados, que además llevan procesos creativos de otros espectáculos, no habrá problemas con la proyección de la voz". No obstante se agregarán micrófonos ambientales para potenciar las voces del elenco.


Otro desafío fue claramente el tamaño del escenario, que es considerablemente mayor que el de la Franklin. "Tuvimos la exigencia de poder ampliar más sus traslados dentro de la escena con las interpretaciones, es un espacio que todavía sigue siendo un espacio amable y trabajable naturalmente por los actores" refirió Domínguez, quien destacó que pudo comprobar "que se produce un fenómeno donde el viento casi no se siente allá abajo, el escenario tiene varios metros de profundidad con respecto al nivel de calle y el viento es como que pasa por arriba".


El espectáculo contó con el apoyo del INT (Instituto Nacional de Teatro) y Biblioteca Franklin y en esta ocasión actuarán Inés Mira, Mayra Palma, Valentina Chavez, Renato López, Juan Bueno, Matías Uliarte, Fernando Balmaceda y Dardo Quiroga.