Después de hacerse conocida en la telenovela de Disney Soy Luna, Karol Sevilla apostó por la música, aunque sin dejar de lado la actuación. La artista de 21 años acaba de sacar el segundo single del año, "Nadie te entiende", con muy buena repercusión. Además aunque decidió salir de su rol de estrella infantil, sigue ligada a la gigante corporación que a fin de año la tendrá nuevamente como protagonista de una producción en la plataforma digital, "Siempre fui yo".


Tomando mate, infusión que descubrió cuando vivió en Argentina el tiempo que hizo de Luna Valente, la joven que tiene más de 21 millones de seguidores en las redes sociales conversó con DIARIO DE CUYO a través de Zoom. "Me llevé a Argentina en mi corazón, es mi segunda casa, me fui a los 15 años a vivir ahí, estudie en el Colegio Militar de Buenos Aires, así que sé más de la cultura argentina que de la mexicana. Soy mitad mexicana y mitad argentina, adopté muchas costumbres de allá, el mate es parte de todo" recordó la artista, radiante, emocionada por su reciente lanzamiento discográfico y reflexiva tras superar el covid-19, y no duda en hacer llegar su mensaje a los jóvenes para que se sigan cuidando del virus. "Los jóvenes nos sentimos inmortales, pensamos "a mí no me va a dar' y la verdad que me llevé un susto' reconoció la cantante que habló de su música, su evolución como artista y qué espera para el futuro. 


-¿Cómo te fue con el lanzamiento del nuevo tema?

-Estoy súper emocionada. Ha sido un reto bien grande. Cada single que saco estamos atentos a si a la gente le va a gustar o no, es un miedo grande de no saber la respuesta. Pero la verdad es que reaccionaron muy bien. En este videoclip salí de mi zona de confort totalmente, es súper loco visualmente, llama mucho la atención, es muy rosa, pero también llega a ser súper empoderado; tiene muchas personalidades, es una onda k-pop también y muestra a una Karol como si fuera de historieta. Es bien bonito, la canción a la gente le gustado muchísimo, habla de los poliamores, no son amigos pero tampoco son novios... muchos hemos estado en esa situación; hacemos cualquier cosa por amor, por llamar la atención a ese chico o a esa chica. El público que me sigue se siente identificado. 


-Para esta nueva etapa, ¿costó separarte de la imagen de "chica Disney"?

-No creo que tenga que ver con dejar de ser la chica Disney, porque está marcado que es así, soy la chica Disney, fui la chica Disney y Soy Luna no es una sombra para mí; ha sido un gran reto, fue uno de los proyectos que más me ha enseñado, de donde más aprendizaje me he llevado. Amo con mi vida a Luna y si el día de mañana tengo un concierto, sé que cantaré una canción de la serie porque Luna me dio la posición que ahora tengo, Disney es mi familia y siempre le estaré agradecida. Pero sí me di cuenta de que no quería quedarme sólo con el público infantil, sino que quería crecer. Cuando salí de Soy Luna fue un camino pensado, porque no quería que fuera un cambio de la nada, decir "Ya está, voy a tocar otro tipo de temas". No, fue ser claros de que iba creciendo, de que la gente viera que estaba haciendo otro tipo de música, hasta llegar al primer sencillo, "Tus besos" y me di cuenta de algo bien loco, que cuando salió hubo mucho público chiquito que seguía a Soy Luna que se fue, que dejó de consumir lo nuevo, se dieron cuenta que en el videoclip salgo más mujer, es otro tipo de canciones y llegó un público nuevo, que le empezó a gustar mi música, el cambio es que el público eran jóvenes que también están pasando por esta etapa de volverse mujeres y hombres. 


-Entonces, ¿sentís que no hubo conflicto en la transformación hacia una imagen más sexy

-No, no hubo, además se hizo como yo quería, nunca me obligaron a hacer este cambio, me siento muy feliz de lograrlo. Pero además yo soy muy Disney, porque a mí me ponen una faldita o un vestido corto y les digo, "no no, bájale un poquitito" y en el tema de mis letras, tampoco quiero llegar a letras vulgares como las del reggaetón, que hablan mucho de sexo o de las drogas. Ese no es mi idioma, el mío es llegar más a los temas adolescentes, lo que les pasa, el primer beso, el primer amor... nadie habla de eso. Lo que tiene la música bonita es que te sientas identificado y que cada vez que escuches una canción sientas que es lo que te está pasando en ese momento; es lo que pasaba con la música de antes, con una Amanda Miguel, o Yuri, que con poquita letra podías llegar a decir muchas cosas. 


-¿Qué pensás del trato que da a la mujer el reggaetón?

-Creo podría levantar la voz y decir que el reggaetón denigra muchísimo a la mujer, que la sexualiza constantemente, pero es algo que la gente ha hecho moda y nosotros mismos somos los culpables, pedimos que se cambie algo cuando en realidad no estamos siendo coherentes y consumimos eso que habla así de la mujer. Yo no soy nadie para cambiarlo, es lo que está de moda, es lo que vende, lo que la gente consume, no se va a dejar de escuchar. Para ser sincera, yo lo escucho, lo canto, lo tengo en mi playlist, pero sí creo somos los culpables de hacer esto viral. Las modas cambian constantemente. 


 -¿Cómo sigue tu año artístico? 

-Estamos súper enfocados en los sencillos, dentro de poco sale otro y se vienen colaboraciones con otros artistas que me han invitado a ser parte de sus singles y estoy muy feliz de que tengan en cuenta mi voz, mi talento y lo que traigo. Uno de ellos es hombre, tiene un género musical diferente al mío, hace poco escuché la canción y suena espectacular, y es la primera vez que me van a escuchar cantar en una onda así. Después hay un proyecto de serie en Disney+ a fines de este año; e hice un rap para Choco Krispis, también estoy con la campaña de Pedigree, "Adoptame", para perritos en situación de calle; me gusta usar las redes para estas cosas, tener tantos seguidores me permite lanzar estos mensajes constantemente. Además pienso seguir con la música, remar y remar... ya me subí al barco, lo que me queda es remar. 


-¿Qué te gustaría hacer pospandemia?

-Creo que tengo muchos planes de vida, muchos sueños por cumplir y por vivir. Tengo muchas ganas de hacer otro tipo de cosas, como persona, como Karol, no como artista y una de mis prioridades más grandes es poder terminar la universidad, poder cumplir la promesa que le hice a mis padres cuando me dejaron ser artista. Lo que aprendí en este momento es a no hacer planes, que pase lo que tenga que pasar. Subir un escalón a la vez: si se da está bien y sino también está cool. No me voy a adelantar. Adelantarse a lo que pueda pasar hace que te spoilees la vida y hacer spoilers, no está cool.