La esposa de Donald Trump , Melania , esta vez no fue el centro de ninguna crítica por su atuendo. Luego de la polémica desatada tras su paso por Arabia Saudita, país en el que no adoptó el velo que llevan las mujeres por religión, la tercera mujer del presidente de Estados Unidos estuvo en el Vaticano vestida de negro.

Como exige el protocolo, solamente las reinas católicas pueden vestir de blanco, mientras todas las otras mujeres admitidas al encuentro con el Pontífice deben vestir con colores oscuros y con la cabeza cubierta.
Hoy, en la primera visita de Trump al Papa , Melania lució un vestido de encaje negro por debajo de la rodilla, unos zapatos altos al tono y una mantilla de puntilla que cubría su pelo castaño claro.

Junto a ella, Ivanka , la segunda hija del republicano, también respetó las reglas de la audiencia. La esposa del asesor del presidente Jared Kushner también estuvo entera de negro, aunque lució un velo, no de puntilla o encaje, sino de tul.