En una zona clave. Una multitud de manifestantes se congregó frente al Museo de Arte Moderno de Sao Paulo (Masp), un lugar emblemático de esa ciudad.

La izquierda salió ayer a las calles para pedir la renuncia del presidente Michel Temer, ante el descontento de varios brasileños por el escándalo de corrupción que salpica directamente al mandatario.

Los movimientos Brasil Popular y Povo Sem Medo (Pueblo Sin Miedo), así como diversos sindicatos, convocaron a los brasileños para ejercer presión sobre el presidente. Las manifestaciones tuvieron lugar en ciudades de al menos 15 de los 27 estados brasileños, aunque la asistencia de participantes fue menor que en otras marchas, incluido en Sao Paulo, donde la intensa lluvia disminuyó la afluencia de personas y llenó la protesta de paraguas.

En Río de Janeiro, un grupo marchó hasta la casa de Rodrigo Maia, presidente de la Cámara de los Diputados, y quien en función de su cargo tiene la potestad de aceptar o rechazar los pedidos de juicio político contra Temer.

Miles de personas se reunieron frente al Museo de Arte Moderno de Sao Paulo (Masp) para gritar ‘Fuera Temer‘, un lema que ha ganado fuerza en los últimos días, cuando un empresario acusó al presidente de recibir sobornos e intentar comprar el silencio de un exdiputado preso.

Unas 50.000 personas se manifestaron en Belo Horizonte, en la mayor concentración de la jornada. También hubo protestas en todas las capitales del país, con mayor adhesión en Salvador, Fortaleza, Recife y Belén. En Brasilia, la capital del país, unas 300 personas se congregaron en una de las principales vías de la ciudad.

La crisis comenzó cuando el empresario cárnico Joesley Batista confesó ante las autoridades que desde 2010 pagó sobornos a Temer y entregó como prueba una grabación en la que, según la Fiscalía, el presidente le da luz verde para comprar el silencio de Eduardo Cunha, expresidente de la Cámara de los Diputados que se encuentra preso por corrupción.

La prisión para Cunha tiene relación con el caso Lava Jato, que investiga presuntos desvíos de fondos en la petrolera estatal Petrobras. En tanto, la Orden de Abogados de Brasil (OAB) anunció que presentará un pedido de juicio político para impulsar la destitución de Temer, investigado por el caso Lava Jato.

No descarta ‘cortocircuitos’

El presidente Mauricio Macri admitió que ‘puede traer cortocircuitos y problemas‘ en Argentina la crisis que atraviesa Brasil y Temer, quien está denunciado por corrupción en el marco de la investigación Lava Jato.

El jefe de estado dijo que ve ‘con preocupación‘ lo que sucede en el país vecino ya que ‘es nuestro primer socio y hemos estado avanzando mucho en la integración del Mercosur‘, pero aseguró que confía en ‘las instituciones‘ brasileñas y en ‘la justicia‘ que ‘ahí es realmente independiente‘. ‘Todo este proceso puede traer, digamos, cortocircuitos y problemas en el presente, pero sin dudas Brasil saldrá muy fortalecido de todo esto‘, sostuvo Macri a los diarios Clarín y La Nación.