De Madrid. Nazaria nació en 1889 en la ciudad española de Madrid, pero su gran obra la realizó en Oruro (Bolivia). La monja murió a los 54 años.

El papa Francisco canoniza hoy a la beata Nazaria Ignacia de Santa Teresa de Jesús, fundadora de la Congregación de las Hermanas Misioneras Cruzadas de la Iglesia, quien realizó parte de su obra en la ciudad de Buenos Aires, donde murió en 1943 y donde ocurrió el primer milagro que se le atribuye con la cura repentina de una mujer que estaba al borde de la muerte en el hospital Pirovano.

La madre Nazaria era amiga del papa Francisco y su vinculación venía de la labor que realizaba la congregación en las villas miseria de Buenos Aires, donde también acudía el argentino Jorge Bergoglio. La superiora general de las Misioneras Cruzadas de la Iglesia, la madre Daniela Pérez, ha recordado que cuando el entonces arzobispo de Buenos Aires visitaba su comunidad decía: "Por aquí ha taconeado una santa".

En Argentina, la monja fundó la primera casa de su congregación en Villa Pueyrredón. Y se convirtió en una más para todo el barrio. El 6 de enero de 1930, día de la inauguración, ella escribió en su diario: "En la Villa de Pueyrredón se levantará la primera Iglesia de Buenos Aires dedicada a Cristo Rey y a su lado se funda, en esa gran metrópoli, la Cruzada Pontificia. ¡Qué alegría siente mi alma!".

Nacida en España, Nazaria desarrolló gran parte de su obra en Oruro (Bolivia) y después en la ciudad de Buenos Aires. En 1912 fue destinada a la ciudad de Oruro para realizar una fundación. Allí ejerció gran parte de su labor recibiendo incluso la ciudadanía en ese país. Por esta razón se la considera la primera santa boliviana.

En la porteña Villa Pueyrredón, Nazaria dejó una sede de la Congregación de las Misioneras Cruzadas de la Iglesia. Juan Gastaldo, colaborador de la congregación en Villa Pueyrredón (ciudad de Buenos Aires), cuenta que Nazaria Ignacia March Mesa "fue una mujer de aspecto alegre. Era muy generosa, sacrificada, dispuesta al perdón, sociable, sencilla".

Nazaria nació en Madrid el 10 de enero de 1889, hija de una familia numerosa que por razones laborales se radicó en México. En 1908 ingresó a la congregación de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados y en 1912 fue enviada a Bolivia, donde se quedó hasta 1925. Ese año, a pedido del Nuncio Apostólico, fundó en Oruro la congregación Misioneras Cruzadas de la Iglesia.

Nazaria llevó el Evangelio a los más alejados, a las minas, a los ranchos y a los mercados. Organizó y acompañó a desempleados y a agrupaciones campesinas y mineras, encabezó manifestaciones, movilizó a las mujeres fundando el primer sindicato obrero femenino, preparó a las hermanas para recibir y atender a los heridos y huérfanos de la Guerra del Chaco.

Durante los primeros años, la congregación se extendió por diversas ciudades de Bolivia. Después, en 1930 fundó la casa en Buenos Aires y más tarde lo hizo en Uruguay y en España.

Nazaria murió a los 54 años en el Hospital Rivadavia. Fue el 6 de julio de 1943. Sus restos descansaron en el Cementerio de la Chacarita. Luego fueron trasladados a la cripta de la capilla de la casa de la congregación de Villa Pueyrredón (Ciudad de Buenos Aires) y allí permanecieron hasta que, en 1972, fueron llevados a Oruro. Fue beatificada por el Papa Juan Pablo II en 1992.

Nazaria es considerada una visionaria, porque apoyaba que la Iglesia Católica fuera al encuentro de la gente tres décadas antes de que el Concilio Vaticano II lo planteara.

Uno de los dos milagros que se le adjudican ocurrió con una vecina del barrio, cuya hija iba al colegio que dirigían las hermanas de la congregación de Nazaria Ignacia. La mujer, Agustina Ortiz de Jiménez, había sufrido complicaciones luego de un parto que la dejaron al borde de la muerte. Internada en el hospital Pirovano (ciudad de Buenos Aires), las monjas le llevaron una reliquia de Nazaria Ignacia. La curación fue repentina.

El segundo milagro, que le abrió el camino a la santificación, está basado en el testimonio de la religiosa María Victoria Azuara, que sufrió un derrame cerebral en 2010 y perdió el habla. Aunque los médicos descartaron cualquier posibilidad de recuperación, su congregación le rezó a la Madre Nazaria (que para entonces ya había sido reconocida beata), y Azuara recuperó el habla 12 días después, sin explicación científica.

El 26 de enero de este año, Francisco firmó el decreto de canonización. La ceremonia de hoy será presidida por el papa Francisco en la Plaza de San Pedro en el Vaticano. Además de Nazaria, Francisco canonizará hoy a Pablo VI y al arzobispo salvadoreño Óscar Arnulfo Romero.

Su obra en Argentina. La parroquia de Cristo Rey, fundada por la monja Nazaria Ignacia March Mesa.


 

Óscar Romero: "El Santo de América"

A monseñor Romero todos lo conocen como "el Santo de América". Pero será hoy cuando Óscar Arnulfo Romero reciba la condición oficial de santo. El arzobispo de San Salvador, quien fue asesinado en 1980 mientras celebraba misa, solía denunciar las injusticias en sus homilías, y defendía a los más pobres. Hoy en el Vaticano, el papa Francisco oficialmente hará de Romero un santo casi cuatro décadas después de que un disparo al corazón lo transformara en mártir. Romero fue asesinado el 24 de marzo de 1980, un día después de que implorara a la dictadura militar que "cesara la represión" contra los civiles mientras el país avanzaba en espiral hacia una guerra civil de 12 años.