En llamas. Imágenes y videos publicados en la red social Twitter mostraron llamas elevándose en el cielo desde el sitio.

Seis personas resultaron heridas ayer, dos de ellas en estado crítico, al derrumbarse un edificio en Leicester, a 143 kilómetros al norte de Londres, lo que ha originado un gran incendio cuyas causas la policía no considera por ahora que tengan que ver con terrorismo.

La Policía de Leicester señaló en un comunicado que se registró un "incidente importante" en Hinckley Road debido al parecer a una explosión. En otra nota oficial, la policía agregó que los servicios de emergencia están lidiando con un incendio, y que el incidente será objeto de una investigación conjunta con el servicio de bomberos.

Además, pidió no hacer conjeturas sobre las causas de la explosión, al señalar que por el momento no hay indicios de que esté relacionado con terrorismo. Según medios de Gran Bretaña, un portavoz informó de que se habían solicitado seis camiones de bomberos y que el incidente era tratado como una operación de búsqueda y rescate.

Los medios destacaron que el servicio de ambulancia de East Midlands dijo que seis personas habían sido trasladadas a un centro médico de Leicester. Dos de ellas están en estado crítico, según el Hospital Universitario de esa ciudad. La policía de Leicester agregó en Twitter que todos los servicios de emergencia están implicados en el incidente.

Imágenes y videos publicados en la red social Twitter mostraron llamas elevándose en el cielo desde el sitio, que quedó reducido a escombros. Una imagen utilizada por el periódico Leicester Mercury mostró un incendio y los escombros de un edificio destruido que, según dijo, albergaba una tienda y un apartamento encima. "Escuchamos una explosión enorme. Fue bastante aterrador", dijo un residente no identificado que vive a pocas calles de distancia, según una cita reproducida por el Mercury. "Fuimos a mirar por las ventanas del piso de arriba y vimos un montón de humo, y luego, unos segundos después, enormes llamas anaranjadas", agregó. Efe y Reuters