Durísimo. Intenso. Casi sin tiempo para distraerse y con la única ventaja lograda en una pelota parada. Solamente así, Colón y Peñarol pudieron sacarse la mínima ventaja en el áspero debut de ambos en la Zona A de la Región Cuyo del Torneo Federal B que comenzó ayer. Wilson Ortiz, un laburador en serio del fútbol de San Juan, tuvo el privilegio de marcar el único gol del partido cuando iban 21’ del primer tiempo y hasta ahí, el mejor había sido Peñarol que con mucho trabajo en el mediocampo estuvo muy cerca de haber abierto el marcador antes cuando Cristian Villegas apareció solito para definir mal un centro desde la izquierda de Gerardo Pinto. Pero claro, Peñarol fue uno hasta ahí y después se fue desinflando en el resto de esa primera etapa en la que había comenzado mejor pero no lo tradujo en la red. Y claro, Colón Junior se aprovechó de una distracción en la marca del fondo Bohemio y a los 21’ del primer tiempo cuando Martín Flores metió el centro pasado, apareció solito Wilson Ortiz para empalmarla de lleno y abrir el marcador. Intentó la reacción Peñarol pero ese primer tiempo ya no tendría las respuestas que tanto necesitaba como para poder terminar esa primera fracción iguales. En el complemento, Santos Gaitán decidió darle más compañía a Maxi Jorquera haciendo ingresar a Erwin Ramírez pero claro, sin pocas ideas para abastecer los dos puntas no pudo generarle peligro a Colón. Llegó la polémica con la expulsión de Sebastián Pereira en el Merengue y se desnaturalizó el partido porque todo, absolutamente todo, fueron reclamos. De uno y de otro lado. Con la gente de Peñarol sacada contra Gabriel González siendo que tenía uno más y que le quedaba tiempo para poder empatarlo al menos. Tuvo un par de opciones con un tiro libre de Pinto que se fue cerca del palo y otra mandada de Ignacio Serer al que le faltó experiencia para dejarse caer cuando parecía que era penal. Colón se lo bancó a pie firme y metiendo todo. Con 10 y sabiendo que Peñarol se le venía encima, el técnico Ernesto Fullana decidió retocar el fondo con el ingreso de Fabián Carrizo para rearmar la línea de cuatro. Con eso, la actitud y las pocas ideas que se le fueron cayendo a un Peñarol que terminó enceguecido en una pelea estéril contra el árbitro, el Merengue arrancó derecho en el Federal B y eso es lo que a su gente le importa.