Boca venció anoche a Rosario Central, 2 a 1, sobre el final de un frenético partido jugado en el Gigante de Arroyito por la décima fecha del torneo de la Liga Profesional de Fútbol. Los goles fueron convertidos por Gastón Ávila para Central y Luis Vásquez para Boca, ambos en el primer tiempo, y el ingresado defensor local Fernando Torrent marcó en contra de su valla sobre el final del encuentro.

Boca jugó de menor a mayor, fue superado en el comienzo pero se recuperó y dominó el juego en la segunda mitad del primer tiempo y en casi todo el complemento, con la buena circulación de sus volantes -en especial Juan Ramírez y el ingresado Aaron Molinas- y la proyección de sus laterales. Central impuso su juego vertical en el comienzo y en dos o tres toques de Emiliano Vecchio. A los 10" Central tradujo en la red su dominio inicial: gran córner de Vecchio y mejor cabezazo de anticipo de Ávila, quien le metió con el parietal derecho arriba, en el primer palo, en el primer golazo de la noche. En el ataque siguiente Lucas Gamba le cometió una falta a Campuzano, la pelota siguió e Izquierdoz le metió una plancha a Ruben que pareció de expulsión, pero Espinoza ni siquiera lo amonestó.

Un intento. Vázquez de cabeza, intentó lastimar en el arco. Boca consiguió un triunfo vital que le sirve para reafirmar su gran presente en el torneo.

Central siguió con su libreto de presión alta y ataques verticales y a los 13" casi aumenta con un buen centro de Zabala desde la derecha, despejado por Rojo. Boca se adueñó de la pelota desde los 19" cuando Ramírez jugó de enganche y Sández comenzó a proyectarse por la izquierda. A los 24" Sández volvió a mandar el enésimo centro desde la izquierda y esta vez Vázquez le ganó a Ávila y lo empató con un cabezazo al primer palo. Boca acentuó su dominio del balón y del campo en el complemento y dispuso de varias llegadas claras. Central devolvió golpe por golpe pero Boca dominó el partido en el final. Hasta que a los 44" Weingandt habilitó al ingresado Pavón, quien mandó un centro atrás que Torrent quiso despejar, pero no hizo más que empujarla hacia su propio arco, junto al poste derecho, en el gol en contra que definió un partidazo, en el que Central y Boca se atacaron durante 95 minutos.