Al ataque. Así se va Independiente ante Defensa y Justicia, aunque esto es un espejismo porque el partido salió malo. El Rojo ganó 1-0 y jugará ante Lanús en cuartos de final.


Luego de un partido chato, sin muchas situaciones de peligro sobre los arcos, y que bordeó casi el aburrimiento, Independiente le ganó 1-0 a Defensa y Justicia y de esa forma pasó a los cuartos de final de la Copa Argentina de fútbol.

El único gol del partido lo anotó el defensor Gastón Silva, luego de peinar un centro que cayó desde la izquierda, en el cuarto minuto de descuento que había dado el árbitro Echenique antes que ambos equipos se fueran al descanso.

Ya el primer tiempo salió malo. Con el equipo de Florencio Varela teniendo más la pelota pero careciendo de profundidad. Y con un Independiente anémico de ideas, tanto, que la pelota no le llegó prácticamente nunca a los delanteros.

En ese panorama, Defensa y Justicia pudo haber abierto el marcador pero por mala puntería de sus delanteros y por la buena labor del arquero Campaña esto no se dio.

Y el Rojo, que no había hecho nada en toda la etapa, se fue ganando al descanso de manera increíble. Ya en el descuento y por una falta innecesaria de la defensa rival, el centro cayó en el área chica y Silva alcanzó a peinarlo para desubicar al arquero Unsaín.

Era esperable que el equipo de Soso intentara lo que sea para poder empardar el tablero pero todo siguió siendo gris y malo, más todavía cuando se fue expulsado Fernández. Inclusive el Rojo tampoco tuvo apuro.

Y el partido se fue sin pena ni gloria. Sólo para alegría de Independiente, que ahora jugará ante Lanús en cuartos de final.