La Vuelta modifica, por lo menos por una semana, la vida de varios de los funcionarios de la Secretaría de Deportes. Son siete días donde, como los ciclistas, viven para la carrera. Los deportistas corren, comen y duermen. Gran parte de las 600 personas afectadas a largadas y llegadas trabajan, comen, y duermen muy poco, a retazos, como Leonardo Flores, subsecretario de Deportes y Alto Rendimiento, a cargo de la organización de las llegadas. Es que antenoche el funcionario llegó desde El Colorado, se "tiró" tres horas y a las 3 de ayer, cuando arribaron los camiones desde el promontorio que es el límite de Ullum e Iglesia, se puso a la cabeza del batallón de obreros que armaron toda la estructura.

La organización cuenta con nada menos que siete tráilers.

"Acá (por el velódromo) y en la última etapa en la Avenida, reunimos a los dos equipos, los 400 de llegada y los 200 de largada. En otras etapas, como en la de Valle Fértil-Jáchal, o Chimbas-Colorado, nos dividíamos", explicó Flores, quien tiene como lugartenientes a Alejandro Gómez, Gustavo Blasco y Andrés González.

Con respecto a la transmisión televisiva, streaming oficial y la de ESPN, Flores es quien diseña y otorga el lugar donde se colocarán los 3 camiones semirremolques, donde están cabinas de transmisión y de técnica, otro que les provee de energía eléctrica, un par de combis y tres camiones de menor envergadura. La empresa sanjuanina Fraluz, es la que distribuye la energía. En tanto que otra empresa local es la que instaló los equipos de aire acondicionado para las carpas. "Nos cortarán el tránsito de la Avenida a las 00 de mañana (por hoy), así que pensamos que en unas seis u ocho horas podremos armar todo para la última etapa", explicó con una sonrisa Flores.