Los hinchas de Boca reaccionaron desilusión cuando les informaron la decisión de la Conmebolde suspender la primera Superfinal de Copa Libertadores ante River debido a las fuertes lluvias que cayeron en la Ciudad de Buenos Aires desde las primeras horas del sábado.

Cerca de las 15.30, desde los altoparlantes de la Bombonera la voz del estadio informó la reprogramación del encuentro, que se decidió luego de que el árbitro Roberto Tobar recorriera el campo de juego unos 20 minutos antes y constatara que no estaba en condiciones para jugar.

Inmediatamente bajaron los silbidos de desaprobación desde las tribunas, que estaban ocupadas por los grupos de simpatizantes que llegaron temprano. Hubo algunos cánticos contra River, pero inmediatamente los presentes empezaron a desconcentrar y a retirarse del estadio.

Los hinchas deberán regresar mañana, ya que la Conmebol dispuso reprogramar la ida de la final para el domingo, desde las 16.