Luego de ganar la etapa y de sacarse la mufa de no haber podido festejar antes, habiendo hecho casi todo bien para conseguirlo, Ricardo Escuela explicó como planificó la carrera con su equipo. ‘El objetivo era bonificar día a día, hoy lo conseguí, logré restar 13 segundos el equipo se jugó para que lo hiciera y pude responderles con la victoria y la malla de líder‘, explicó luego de las fotos y notas de rigor.
Sobre lo que falta, incluida la ida de hoy a San Expedito y la etapa reina de mañana al Colorado, el barrealino dijo que habrá que estar muy atento y concentrado para no cometer errores y seguir sumando en el día a día.
‘Me parece que la etapa a San Expedito no será muy violenta porque al otro día, casi sin tiempo de recuperación hay que correr el tramo más duro, por lo que me parece que los candidatos cuidarán sus patas (sic) para el Colorado‘, confió.
Con respecto a como debe afrontarse una competencia portando la malla de líder, Ricardo no dudo. ‘Hay que ir siempre arriba, de cabeza, para evitar cualquier ataque y para evitar posibles rodadas en el medio del pelotón. Si uno tiene la responsabilidad de llevar la malla que identifica al ganador de la carrera tiene que defenderla con uñas y dientes, yendo siempre al frente.
Escuela, que en Europa y Estados Unido era catalogado como un sprinter que pasa bien la media montaña, sabe que sus chances crecen en la medida que llegue a la etapa reina con la mayor cantidad de segundos acumulados. ‘En las carreras largas, como esta Vuelta cada segundo vale oro, por eso hay que tratar de evitar que los adversarios puedan quitártelos en las bonificaciones. No es sencillo, porque todos tienen el objetivo de lograrlo, pero hay que hacer el esfuerzo‘, culminó.