Godoy Cruz quedó eliminado de la Copa Libertadores en octavos de final ante Palmeiras, con el que perdió 4 a 0 en San Pablo, por la escandalosa sanción de un penal inexistente que cobró el árbitro uruguayo Esteban Ostojich a instancias del VAR en favor del equipo brasileño y que desnaturalizó el posterior desarrollo del encuentro.Esa primera conquista ocurrida a los 12 minutos del segundo período por una mano presunta de Joaquín Varela que no fue tal, ya que no se pudo comprobar en ninguna de las imágenes televisivas pero igualmente el juez oriental terminó sancionando, desnaturalizó el recorrido del encuentro y perjudicó a los "tombinos".

Es que el resultado final resulta absolutamente engañoso a la hora de analizar lo ocurrido en el encuentro, puesto que sin esa invalorable "ayuda" del árbitro uruguayo a Palmeiras, escolta del Santos.