Fue el debut y, como tal, salió complicado. Es que no es novedad eso de presentarse en un torneo, ante un equipo peligroso, y sacarla totalmente barata. Igual, la Selección argentina de hockey se basó en un juego veloz y efectivo. Y además sacó a relucir su chapa. Esa de equipo grande. Algo que no pudo contrarrestar el juego de Angola, con jugadores portugueses en su base. Fue 7-5 para el equipo de José Martinazzo en el debut en la Copa de las Naciones que se disputa en Suiza. Apretado si se quiere, pero gratificante si se tiene en cuenta que este grupo de jugadores argentinos se juntaron en el camino, se movieron un par de días y salieron a pista.
Esto, agregado a que el Albiceleste fue siempre arriba en el tanteador, brinda un margen de tranquilidad, que adquiere mayor relevancia teniendo en cuenta que Angola es un adversario peligroso, que está en el segundo escalón del hockey mundial y que ya viene trabajando junto desde hace tiempo. Hoy, en su segunda presentación, la Argentina se medirá frente al débil Macao (desde las 14, hora argentina) que indudablemente es el rival más accesible del grupo.
Ayer el partido arrancó favorable para los argentinos. Es que el Tuco Abalos y Lucas Ordóñez (dos veces) llevaron el tablero a un 3-0 que parecía cómodo. Pero los africanos empezaron a contestar con goles y se hicieron complicados. Al descanso se fueron 5-2 para el Albiceleste, pero en el juego esa diferencia era más corta.
El complemento salió parecido. José rotó el equipo titular pero la peligrosidad de la dupla portuguesa Pinto-Vieira tuvo el partido ahí nomás. Fue triunfo argentino. Apretado. Difícil. Pero totalmente merecido. Los muchachos ya pasaron los nervios. Ahora se viene lo mejor.