Botafogo, donde fueron titulares los argentinos Leonel Di Placido y Víctor Cuesta, clasificó a los octavos de final de la Copa Sudamericana de fútbol al empatar, de local, con un digno Patronato de Paraná 1 a 1.

En un encuentro desarrollado bajo la lluvia en el estadio Olímpico Nilton Santos de la ciudad de Río de Janeiro, Botafogo abrió el marcador rápidamente con un gol de Luis Henrique a los 3 minutos del primer tiempo, mientras que Damián Arce igualó en el segundo. El encuentro de ida fue 2 a 0 para los brasileños por lo que el marcado global quedó 3 a 1 a su favor.

Patronato mostró una cara interesante, buscando el arco rival, sin refugiarse cerca de su arquero, buscando sociedad y triangulaciones para poner en problemas al líder del torneo brasileño.

Apenas comenzó el partido, Botafogo sacó a relucir su presión alta, complicó al fondo de Patronato gracias a que Janderson se metió en el área y le cedió la pelota al goleador Luis Henrique, quien sin marca en el punto del penal, solo debió empujarla al fondo de la red. En el resto de la primera etapa, Patronato se prodigó en esfuerzos, jugó bien la pelota, la movió muy bien y trató de llegar al arco rival aunque sin profundidad.

En el segundo tiempo, se mantuvo el esquema de la primera etapa, Botafogo y Patronato luchaban, pero a los cariocas les costó definir el encuentro y cerrar el resultado por lo que Patronato recibió una bocanada de aire a los 22 minutos, cuando Domingo realizó una corajeada y se la cedió al recién ingresado Damián Arce que encaró al arquero y definió a un palo. Con mucha dignidad, Patronato siguió yendo, pero el final resultó inexorable para cerrar una participación histórica.

Contundente

Eduardo Domínguez, DT de Estudiantes, se refirió a la "contundencia" para explicar la abultada victoria de su equipo sobre Barcelona por 4-0, resultado que le permitió avanzar de ronda en la Copa Sudamericana. "Hay que seguir trabajando, mejorar en el terreno local", agregó Domínguez.