Franco Vivian sabía que iba a llamar la atención su Chevrolet Cruze pintado de color rosa pero no esperaba que también se iba a terminar convirtiendo en el mismo final en el gran protagonista debido a la aparición de la lluvia y una dosis de buena fortuna que no tuvo ningún inconveniente en reconocer.
La pole de la novena fecha del Súper TC 2000, que se diputa en El Zonda-Eduardo Copello, Copa Banco San Juan, quedó en poder del piloto que aceptó ser parte de una campaña de LALCEC (Liga Argentina de Lucha contra el Cáncer) que busca concientizar sobre el cáncer de mamas, curiosamente uno de los pocos que se puede combatir pero también el que más vidas de mujeres se cobra en el país.
La jornada estaba siendo dominada por los Fiat Linea. Mariano Werner había sido el más rápido en el primer entrenamiento, Facundo Ardusso en el segundo y en la primer clasificación. Y Christian Ledesma en la 2da.
Pero en ese momento apareció una tenue garúa que creció a llovizna mientras retiraban el auto de Facundo Chapur, el unico que sufrió un percance.
Entonces surgió la gran incógnita para los 10 clasificados a la Q3. Siete de ellos decidieron salir con goma para lluvia y solamente 3 siguieron con lisas.
Matías Rossi (Corolla) fue quien logró el mejor tiempo en la primera vuelta y luego lo mejoró Agustín Canapino (408). La llovizna cesó y la historia cambió. Apareció un duelo tan apasionante como inesperado hasta ese momento entre Norberto Fontana (Cruze) y Leonel Pernía (Fluence), en el que alternaron la punta en tres ocasiones cada uno.
Parecía que Pernía se quedaba con la pole por ser el único piloto que estuvo por debajo de 1m15s, pero en el último intento Norberto Fontana clavó 1m14s433 y cuando todo indicaba que nadie le quitaba la pole, porque Pernía se encontró con Bebu Girolami en el camino, solamente quedaba tiempo para ver como el llamativo auto rosado completaba su giro, justamente el tercero que había girado también con gomas lisas.
Y la sorpresa fue mayúscula cuando los monitores mostraron que su tiempo era de 1m14s419, es decir que por apenas 14 milésimas se quedaba con el 1.
“Ayudó que se fue secando la pista, porque esa vuelta no fue la más prolija que hice”, reconoció después.
Así, Vivian ganó su segunda clasificación de la temporada. Y como no sufre penalizaciones partirá hoy en el primer lugar de la primer serie, escoltado por un Rossi que se vio beneficiado por el handicap y tiene licencia para soñar en su cuarta victoria consecutiva en el autódromo sanjuanino. Otra labor destacada fue para Matías Muñoz Marchesi (Cruze), quien partirá primero hoy en la segunda serie, seguido por Leonel Pernía.
¿Habrá hoy más sorpresas? Eso sí, autos rosados, uno solo.