El fútbol argentino ya se reactivó con la vuelta a las prácticas de los planteles de Primera la semana pasada. Ahora le está por llegar el turno a los clubes de la Primera Nacional donde se encuentra San Martín. Por eso el club dará hoy un paso muy importante apuntando a las prácticas que deberán reiniciarse el 3 de septiembre tal cual autorizó la AFA. Por eso, desde hoy y durante los próximos 14 días, un total de 19 personas, entre ellas jugadores y el cuerpo técnico que encabeza Paulo Ferrari, harán el aislamiento obligatorio en la Villa Don Tomás.

Luego de ello, podrán realizarse los hisopados, ya en esa etapa junto a los futbolistas del Verdinegro que se encuentran hace tiempo en la provincia ya sea por ser residentes o por no haberse ido a sus ciudades de origen durante la cuarentena por el coronavirus. Dentro del aislamiento estarán el técnico Ferrari y sus colaboradores que arribaron desde Rosario. Mientras que entre los jugadores se encontrarán Marcos Fernández, Cristian Sánchez, Lucas Campana, Ian Escobar y Lucas Corti, éste último quien renovó su contrato, mientras que los primeros son algunos de los regresaron a la institución para lo que resta de la campaña.

A su vez, existe la posibilidad de sumar al delantero de Desamparados, Bruno Rodríguez, aunque por ahora solo hay sondeos. Mientras que un refuerzo confirmado es el lateral que proviene de Gimnasia, pero que pertenece a San Lorenzo, Alejandro Molina.

El otro punto importante es que Ferrari, junto con la dirigencia, decidieron darle espacio a los futbolistas con mayor futuro de las inferiores teniendo en cuenta que el presupuesto actual del club es muy bajo respecto a lo que tenía previo al parate.

Una incógnita clave a develar es cuándo y cómo volverá la actividad: si se terminará el torneo que se suspendió faltando nueve fechas o habrá uno nuevo.


A la distancia

Durante el parate por el coronavirus, el plantel de San Martín tuvo a sus jugadores entrenando de manera personal en sus hogares.

Algunos se fueron a sus lugares de origen y otros, como por ejemplo el defensor Francisco Mattia, se quedaron en San Juan y así cumplieron con lo planeado por Paulo Ferrari, quien desde Rosario supervisó todo.