Una notable actuación del arquero de Boca, Agustín Rossi, que no seguirá en el club y que privó a Racing de convertir, más un polémico final que podría haber terminado con un penal en favor de Boca resultaron los hechos salientes del clásico que se jugó en el "Cilindro" de Avellaneda y que terminó con el marcador 0-0.

Racing fue amo y señor del primer tiempo. Desde el mismo inicio del partido se mostró decidido a buscar el gol. Tanto, que antes de los dos minutos ya había tenido dos situaciones propicias. En la primera el tiro de Mena fue tocado al corner por un defensor. Y en la segunda, tras un corner, Fabra despejó parado en la línea de gol.

Boca no podía contener a su rival. Y el local probaba variantes distintas para preocupar el arco de Rossi. Precisamente el arquero Xeneize tuvo una gran atajada a los 21". Y después Rojas y Alcaraz se perdieron goles cantados tirando la pelota para arriba en posiciones inmejorables para anotar.

Los arqueros Rossi (de Boca) y Arias (de Racing) fueron las figuras del partido.

Antes de los 40", recién Boca tuvo su primera oportunidad. Llegó tras un error de Moreno, que terminó con un tiro cruzado de Benedetto que se fue cerca. Ahí nomás un centro de Villa y un rebote que Varela casi anota. Pero el local replicó antes del final de la primera etapa con un tiro fuerte de Moreno y un cabezazo de Alcaraz.

En el arranque del complemento se dio más de lo mismo. Si hasta en el primer minuto de juego el local tuvo el gol pero Alcaraz no pudo con el seguro de Rossi (por ese entonces ya la figura del partido). En el estadio ya había fastidio por tantas oportunidades desperdiciadas.

Con el paso de los minutos, Boca fue reaccionando. No sólo equilibrando el juego sino además llegando al arco de Arias. Promediando la etapa otra vez Racing dominó. Por eso Gómez, recién ingresado, sacó un bombazo que Rossi mandó al corner. Pero ese dominio decayó por completo entrando en la recta final, lapso en el cual Boca pudo haber tranquilamente ganado el partido. Tuvo cuatro chances netas de gol pero el arquero Arias reaccionó en todas. Y en el mismo final se dio esa aparente mano de Gómez en el área que podría haber sido penal pero Rapallini interpretó que no fue intencional.