Un hombre aceptó ser condenado a 8 años de prisión por abusar sexualmente de una nieta cuando ella tenía 15 años e iba a quedarse a su casa. El sujeto, en una ocasión en la que quedaron solos, la manoseó, le introdujo los dedos hasta hacerla sangrar y le apoyó los genitales. Mientras que en otra oportunidad, cuando la víctima tenía 16, volvió a intentar abusar de la menor. En un juicio abreviado con Fiscalía, el hombre admitió su autoría y fue castigado por la jueza Celia Maldonado por el delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo. El caso había sido denunciado el último viernes y ese mismo día el ahora condenado había sido apresado.