Un joven de 21 años pasó un par de días preso, sospechado de haber "violado" a su prima de 16, hasta que la jueza de Garantías, Verónica Chicón, decidió liberarlo hasta comprobar un dato clave en el caso: determinar si comprende o no cuando un hecho es criminal, porque es analfabeto, casi no habla y está medicado porque, según su madre, sufre alteraciones mentales, dijeron fuentes judiciales.

El caso es investigado en la UFI Anivi que dirigen el fiscal coordinador, Raúl Iglesias, y la ayudante fiscal Florencia Buteler. Ambos pidieron la detención del joven (es defendido por Julián Gil), que ocurrió el lunes por la tarde, cuando les llegó la denuncia de la madre de su prima por el presunto ataque sexual.

Según esa denuncia, la chica estaba apoyada en una ventana, cuando el joven la agarró desde atrás, la llevó hasta otro lugar de la casa y le metió los dedos en sus genitales.

Hasta que una junta interdisciplinaria integrada por al menos un médico y un psicólogo lo examine y determine si el joven es o no inimputable (es decir si comprende cuando se comete un delito) estará al cuidado de su madre y no podrá acercarse a su prima a menos de 500 metros.