"Mi hija no tuvo la culpa, fue un accidente, ella ama a sus hijos y está totalmente destruida"
Eso dijo la abuela del nene de 4 años que quedó al borde de morir por una lesión en la cabeza. Investigan si fue maltratado.
Eso dijo la abuela del nene de 4 años que quedó al borde de morir por una lesión en la cabeza. Investigan si fue maltratado.
A las 13.20 del último lunes Tamara Cuello (26) ingresó al Hospital Rawson con su hijo de 4 años, diciendo que se había golpeado accidentalmente mientras lo bañaba. La mujer estaba desesperada porque el niño no reaccionaba y después se puso peor cuando los médicos le dijeron que su estado era de suma gravedad.
Pese a la explicación que le dio a los policías que la entrevistaron, se dio intervención a la Justicia para que se investigue si el pequeño fue víctima de un ataque y hasta anoche los investigadores no descartaban nada, dijeron fuentes policiales.
"Mi hija no tuvo la culpa, fue un accidente, ella ama a sus hijos y está totalmente destruida", dijo al respecto Alicia Miranda, madre de Tamara y abuela del menor. La mujer explicó que el supuesto accidente ocurrió mientras su hija bañaba al niño (tercero de 4 hijos), sobre las 9 de ese día, en su casa de la Villa Juan Pablo II, en Chimbas. "A él no le gusta que le laven la cabecita. Cuando le lavaba el niño se ha movido y se pegó la cabeza contra la pared", afirmó. Y siguió: "Ahí fue sólo el golpe. Después salió lo más bien. Tomó el té y salió a jugar. Al rato le dijo a la madre que tenía sueño y solito fue y se acostó". La desesperación llegó cerca del mediodía, cuando fueron a hablarlo para almorzar. Es que el niño no despertaba y no respondía a nada.
De inmediato llamaron a una ambulancia que los trasladó hasta el Hospital Rawson. Los médicos de entrada les dijeron que el nene estaba muy grave. "Tiene muerte cerebral, no responde a nada. Encima no ha mejorado nada, el médico nos dijo que se ha agravado", lamentó la abuela.
Sobre la investigación que se inició para saber si fue o no víctima de maltrato, dijo que "es entendible". "Yo entiendo lo que está haciendo la Policía porque sé que hay casos donde al hospital llegan niños muy golpeados porque los muelen a palos. Pero este no es el caso, mi hija ama a todos sus hijos. Es una mujer muy responsable, a los niños los tiene limpios, impecables, no les falta vacunas, nada... Ha sido un accidente, una desgracia. Estamos deshechos. Yo estoy molida por dentro pero no me quiero quebrar porque quiero darle fuerzas a mi hija. Ella me dice: "¿Mamá, si se me muere qué hago?" Llora, está muy mal", cerró y pidió cadenas de oración.
En la Policía dijeron que aguardan el informe del médico legista, que resulta clave para determinar cómo sufrió esa lesión en la cabeza.
Una desgracia peor
El supuesto accidente remonta a los Cuello al 2013, cuando les tocó vivir una desgracia con un final peor: Kevin (13), hijo de Alicia Miranda y hermano de Tamara, falleció al recibir una descarga eléctrica al trepar por el caño de un medidor de la luz de una casa vecina para buscar una pelota, en Chimbas. "Solamente una madre sabe lo que es perder un hijo", dijo Miranda.
La joven había llegado al lugar junto a su padre para comprar un vehículo. Tras realizar la operación, solicitó ir al baño y decidió dejar al recién nacido allí.
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