Mauricio Baginay, el joven de 24 años padre de dos niños, murió en las primeras horas de este miércoles  después de quemarse el 90% de su cuerpo durante un incendio en la vivienda que ocupaba en Loteo San José, en Rawson. 

El hombre había quedado en gravísimo estado internado en el Hospital Marcial Quiroga  después que el lunes por la noche se originara un siniestro cuando intentaba mezclar nafta con aceite.  Desde el nosocomio informaron que el fallecimiento fue por un paro cardiaco producto de la gravedad de las heridas sufridas. 

La principal versión es que apenas ocurrió el siniestro, el joven corrió hacia afuera para apagarse las llamas con un surtidor del patio, mientras su señora también resultaba quemada por intentar ayudarlo. Los niños, pudieron escapar por la ventana del dormitorio.

Ante los gritos, otros inquilinos llegaron a socorrerlo: uno de ellos colaboró para controlar las llamas y apagó las hornallas de la cocina.