El juez de Garantías Juan Gabriel Meglioli dictó ayer 6 meses de prisión preventiva para el joven acusado de asesinar a su padre, el policía federal Miguel Ángel Carbajal (54). El fiscal Iván Grassi (UFI Delitos Especiales) le imputó a Paolo Enrique Carbajal (21) el delito de homicidio doblemente agravado, por el vínculo y por alevosía. Y pidió al juez y consiguió que se habilite una extracción de material genético del imputado, pese a que la defensora oficial Cecilia Mut se había opuesto a esa medida. Ese material servirá, en primera instancia, para confirmar si el muchacho es o no hijo biológico de la víctima. Y también para cotejar si quedaron rastros de su perfil genético en el cuerpo de su padre, en la casa o en alguno de los elementos secuestrados en la escena del crimen.

Para el fiscal Grassi, Paolo Carbajal ideó un plan para deshacerse de su padre. El muchacho estaba viviendo en Salta, en lo de su abuela materna, con sus dos hermanos menores. Según la acusación, sacó tres pasajes a San Juan con diferentes fechas, finalmente llegando a la provincia el viernes 12 de este mes. Al llegar se alojó en un hotel de Capital y tras el crimen pasó por al menos uno más, en el que se presentó con otro nombre, consta en la acusación. La hipótesis de los pesquisas es que el crimen ocurrió durante la madrugada del domingo 14, cuando el imputado se dirigió a la casa de su padre en la Villa Huarpe, Pocito. No le costó entrar porque tenía una copia de las llaves. La víctima dormía cuando fue abordada. Primero le dieron un cuchillazo en el pecho y luego otro más que le causó la muerte.

Ayer el acusado se negó a declarar. Según Fiscalía, el móvil del asesinato pudo haber sido una cuestión económica, aunque los acusadores también deslizaron que el muchacho tenía odio hacia a su padre, sobre todo luego de la muerte de su madre por covid-19. Esa mujer se contagió en una visita a San Juan y murió también aquí, hace 3 meses.

Todo ese fin de semana el imputado no se mostró. Recién el lunes apareció y dijo a sus familiares que acababa de llegar de Salta para despedir los restos de su padre. Cuando lo apresaron, en la casa de un tío donde estaba parando, en Rawson, le hallaron una bolsa con prendas manchadas (posiblemente con sangre), guantes de látex y una sevillana.