Un gendarme y su hijo de 9 años se salvaron en la madrugada de ayer de sufrir consecuencias graves, luego de chocar y volcar en el auto en el que viajaban por ruta nacional 40 hacia el Norte. Según la Policía, Aníbal Boca (38) y su hijo Antonio, apenas sufrieron golpes ya que llevaban puesto el cinturón de seguridad.

El hecho ocurrió en el cruce con calle 17, en Campo de Batalla, Pocito. Allí, explicaron, Boca perdió el control de un Volkswagen Gol (¿se durmió?), se fue hacia su derecha e impactó contra la punta de un guardarrail de un puente, volcó y terminó en una acequia previa al cauce impermeabilizado de un canal con gran caudal de agua.