Se conoció este jueves que personal naval halló el cuerpo de una persona fallecida en la zona de Cuatro Esquinas, donde días atrás desapareció el sanjuanino Alejandro Cabrera, el joven de 17 años que fue arrastrado por la corriente en esa playa chilena.
Cuando hace tres días se había dado por finalizada la búsqueda, se produce este hallazgo. Según publicó diario local El Día, el cuerpo fue trasladado a la morgue y se espera que la Fiscalía inicie los trámites correspondientes para confirmar su identidad.
Cuando Alejandro fue arrastrado por el oleaje, había ingresado a bañarse junto a otros cuatro jóvenes entre los que estaban una hermana de 19, un hermano de 14 y un primo de 19 años.
Fue gracias a la ayuda de ciclista que pasó por el lugar, quien no dudó en lanzarse al mar para rescatar a los jóvenes, que cuatro de los cinco, sobrevivieron.
Desde ese momento se montó un operativo de gran despliegue del que participaron la Armada de Chile, bomberos y las municipalidades de La Serena y Coquimbo, totalizando casi 100 personas y una gran variedad de equipos aéreos, marítimos y terrestres, sin conseguir rescatar con vida a Alejandro.
Cómo fue el rescate de los jóvenes
El rescate estuvo marcado por el actuar de Francisco Boldo, quien transitaba en bicicleta por la orilla de la playa cuando se percató de la emergencia. “Me encontré a la tía desesperada, manoteando. Escuché gritos adentro y me lancé a ayudarlos”, relató.
Boldo señaló que logró rescatar a cuatro de los cinco adolescentes, aunque uno de ellos estaba inconsciente al momento de encontrarlo. “Había cinco jóvenes. Rescaté a cuatro; me faltó uno, se me fue de las manos. Estaba solo y no pude hacer más”, explicó.
El ciclista detalló la secuencia del rescate. “Pillé a uno cerca de la orilla y lo acerqué a la playa. Luego me volví por dos hermanos; uno estaba ahogado. Le hice la reanimación en el agua y traté de tranquilizarlo”, dijo.
Agregando “con él en un brazo fui por la hermana, que estaba más allá. También la tranquilicé. Más adelante estaba el otro hermano, que estaba un poco mejor. Los mantuve a todos, pero ahí se me fue uno de las manos. No pude hacer más”.
El quinto joven desapareció en medio del oleaje antes de que el testigo lograra alcanzarlo. Boldo indicó que permaneció más de 30 minutos dentro del mar, intentando mantener a los adolescentes a flote hasta la llegada del personal naval. “Llegaron como media hora después. Tuve que meterme más adentro con los niños para controlar la situación”, afirmó.
Fuente Diario El día

