En las últimas horas se conocieron las imágenes del momento en que Diego Rubén Kamariski, jefe de ventas de la fábrica conocida bajo el nombre de fantasía “Tankito”, fue detenido acusado de cometer un hurto calificado que habría dejado a la empresa con pérdidas millonarias.

Según pudo saber DIARIO DE CUYO, la investigación de la UFI Delitos Contra la Propiedad comenzó luego de que un hombre de apellido Suárez, socio-gerente fundador de la firma ubicada en Capital, denunciara irregularidades detectadas en la caja fuerte de la compañía, que cuenta con unos 60 empleados.

Todo empezó hace unas tres semanas, cuando la contadora pública de la empresa advirtió que la manija de la caja fuerte, instalada en la oficina de reuniones o ventas, no estaba en su posición habitual. Poco después, confirmaron que faltaba dinero.

Al revisar las cámaras de seguridad, los directivos descubrieron que, en varias fechas y entre las 16.30 y las 18.00, la cámara del sector de la caja fuerte dejaba de funcionar. Al analizar grabaciones de otras áreas, detectaron que Kamariski ingresaba al sector de monitoreo, desinstalaba la cámara correspondiente a la caja y luego se dirigía directamente a ella.

Ante la falta de registros, la empresa decidió instalar una cámara adicional. Fue gracias a esa nueva grabación que finalmente lo vieron abriendo la caja fuerte y retirando dinero. Las imágenes revelaron que el empleado tenía llaves tanto de la puerta como del cofre, algo que llamó la atención del denunciante, pues la llave debía estar solo en manos de la hija del fundador, la encargada y la contadora.

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Las sospechas indican que Kamariski habría robado en numerosas oportunidades, incluso sustrayendo hasta $500.000 por vez, demorándose apenas 25 a 30 segundos en cada maniobra.

El caso escaló cuando la hija del dueño volvió a notar movimientos sospechosos en la cámara recién instalada y avisó a las autoridades. Personal policial llegó al lugar, entrevistó al empleado y procedió al labrado del acta correspondiente. Durante el procedimiento se secuestraron dos llaves doradas con la inscripción “Tabor” y dinero en efectivo: un fajo con $66.000 en billetes de $2.000 y $78.000 en diversas denominaciones.

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Debido a la evidencia recolectada, se ordenó la detención de Diego Kamariski, quien quedó alojado en la Comisaría 3°. También se dispuso el secuestro de su teléfono celular para realizar pericias.

En los próximos días, el ahora exjefe de ventas será llevado ante un juez para ser formalmente imputado por los delitos que se le atribuyen. La investigación busca determinar el monto total sustraído, que podría ascender a varios millones de pesos.