A once cuadras de su antigua casa, la repartición estatal que más visitas recibe por día funcionará desde hoy en el Centro Cívico. Después de un fin de semana agitado por la intensa mudanza, la Dirección General de Rentas (DGR) se instaló en la planta baja del gigante de calle Las Heras, en el extremo sur del edificio, donde estrenará oficialmente un sistema de atención al público que ya se había puesto a modo de prueba para agilizar los trámites. El traslado del organismo recaudador dejó completamente vacío al histórico 9 de Julio y todavía no se sabe cuánto tiempo pasará antes de que sea ocupado por su nuevo dueño, el Poder Judicial.
Con dos ingresos principales (Ver Infografía), el organismo recaudador se espera que le de mucha mayor afluencia de público al Centro Cívico, el gigante que se inauguró al año pasado para albergar a la mayoría de las reparticiones del Estado. Esto, porque es la que más visitas recibe por lejos: según los encargados de atención al público, asisten diariamente entre 1.500 y 2.000 personas a realizar algún trámite relacionado al pago de impuestos.
Por años, funcionó en el extremo oeste del 9 de Julio, en planta baja, con instalaciones precarias y pocas comodidades para los contribuyentes. La contracara será el amplio y lujoso salón que tendrá en el Centro Cívico, en donde se pondrá en práctica un nuevo sistema de atención que ya estaba a prueba en el antiguo edificio y que busca agilizar los trámites para el público.
Antes, con sólo 15 terminales informáticas, los trámites se hacían en forma descentralizada en distintos sectores y si un contribuyente tenía que consultar por más de un impuesto, se veía obligado a soportar varias colas. Ahora, con 50 terminales informáticas y siempre en los horarios de 7.30 a 13 y de 16 a 20, habrá un área que recibirá el trámite y lo derivará a un solo sector, se trate de uno o más impuestos.
El mecanismo debería ser menos burocrático y se basa en dos mesas derivadoras -no son de informes- y cinco islas. La persona deberá dirigirse a una mesa derivadora y de ahí la remitirán a una de las islas, de acuerdo al trámite que desee realizar. Una hará las veces de mesa de entradas, otra será de grandes contribuyentes, otra de atención especializada y dos de atención general.
Rentas y el resto de las reparticiones del Ministerio de Hacienda han sido las últimas en abandonar el edificio 9 de Julio. La mudanza estaba prevista para el año pasado y luego pasó a abril, pero se postergó hasta este mes por la complejidad de la instalación y verificación de la parte informática. Sucede que se trata de un ministerio sumamente sensible, ya que bajo su órbita hay bases de datos clave para el funcionamiento del Estado: el TRADFIN contiene la información financiera de la administración pública, en la Dirección Provincial de Informática se maneja fundamentalmente el pago de sueldos de los agentes estatales y en la DGR están los datos de todos los contribuyentes.
Además de la planta baja, las reparticiones de Hacienda tienen espacios reservados en los dos pisos siguientes, siempre en el módulo que está junto a la plaza seca. Las oficinas de los directivos de la DGR, la Contaduría General, la Tesorería General y la Dirección Provincial de Informática estarán en el primer piso. Uno más arriba van las oficinas del ministro y el secretario de Hacienda, junto a la Dirección de Presupuesto.
