Desde el jueves de la semana pasada, las órdenes para atención médica que brinda la Obra Social Provincia (OSP) subieron un 30 por ciento. De esa manera, los llamados bonos de consulta y de farmacia saltaron de 50 a 65 pesos y de 60 a 78 pesos respectivamente. El aumento estuvo atado a la pauta salarial que los empleados públicos recibieron en marzo, lo que será el parámetro para futuros incrementos. Así, los valores de las órdenes tendrán otro salto del 7 por ciento en mayo, del 6 en julio y del 7 por ciento en octubre, lo que totalizará un 50 por ciento en el año, es decir, una réplica del acuerdo por sueldos al que arribaron el Gobierno y los gremios estatales. Inclusive, en la negociación paritaria está prevista una instancia de revisión en julio para analizar el avance de la inflación, por lo que, si hay una suba salarial, también tendrá un correlato en los montos de los bonos, explicó el interventor de la OSP, Daniel Gimeno.

La entidad es la obra social más grande de la provincia con unos 146 mil afiliados. Para la cobertura médica, entrega las órdenes a sus asociados que luego deben presentar a los distintos prestadores médicos. Los valores de los bonos venían desfasados, al punto que en septiembre del año pasado se hizo una actualización luego de siete años sin aumentos, lo que arrojó un salto de hasta el 525 por ciento. La cifra es enorme, pero en valores nominales significó una suba de 8 a 50 pesos para el bono de consulta, por ejemplo. Gimeno destacó que, para llegar a ese número, se tomó en cuenta la actualización de los salarios de los empleados públicos durante ese período.

De acuerdo al esquema, están previstos tres aumentos más en los bonos.

La fuerte suba del año pasado se aplicó a todas las órdenes y el funcionario indicó que, "para no desfinanciar a la obra social, cada vez que haya un aumento salarial, el bono irá en el mismo sentido". Bajo esa premisa, Gimeno firmó la resolución 1.888 del 25 de marzo, en la que dispuso un incremento del 30 por ciento a partir del 15 de este mes, la misma cifra del primer tramo del acuerdo por los sueldos de los estatales. De esa forma, la orden de consulta para pacientes ambulatorios se fue a 65 pesos, mientras que la de farmacia escaló a 78 pesos. Ambas son las que concentran más del 80 por ciento de las solicitudes de los afiliados. Luego, la consulta oftalmológica, la práctica odontológica, la orden de farmacia para insulina, la de planes especiales y la de pacientes internados llegó a 156 pesos, de acuerdo a la resolución. El interventor de la OSP indicó que, pese a los incrementos, los valores se encuentran entre los más bajos del país. El funcionario resaltó que la suba obedece a los aumentos de los medicamentos, de las prestaciones médicas y de los precios en general.

Como el y los futuros acuerdos salariales servirán de espejo al aumento de los bonos, habrá una suba del 7 por ciento en mayo, del 6 en julio y del 7 en octubre.

La recaudación de los bonos es apenas una ayuda al presupuesto de la OSP, ya que representa el 1,5 por ciento de los ingresos, expresó Gimeno, quien agregó que el presupuesto mensual ronda entre los 600 y 700 millones de pesos.

Tanto el bono consulta como el de farmacia ahora se descuentan a fin de mes del recibo de sueldo, por lo que las recetas que los afiliados presenten desde mediados de abril, se descontarán con el sueldo que cobran a principios de mayo, indicó Gimeno.

La OSP y los prestadores

En 2020, ante la baja en la actividad médica por la cuarentena, la OSP le hizo un anticipo financiero a los prestadores de la salud privada de más de $70 millones, recordó Gimeno, quien dijo que eso "les permitió pagar sueldos y sus costos fijos, sin que se rompa la cadena de pagos". En la salud privada trabajan más de 10.000 personas y la OSP representa entre el 75% y el 80% de la facturación de la salud privada, señaló.