Desde el viernes, la comunidad educativa de la escuela Marino Bartolomé Carreras, del barrio Aramburu, Rivadavia, está conmocionada por un supuesto caso de agresión de un portero a un alumno de 11 años. Es que una mamá de un chico de 6to grado del turno tarde denunció hasta en la Policía que el portero, que además es casero, tomó a su hijo del cabello, aprisionó su cabeza hacia abajo y le dijo "te voy a partir". Ante esta denuncia, DIARIO DE CUYO habló con Pablo Flórez, el hombre acusado de violencia. El portero admitió que hubo un reto de su parte para con el chico, pero desmintió rotundamente la agresión. De hecho dijo que denunció en la Policía a la mamá que lo acusó porque ella le pegó dos cachetadas.

"Estoy muy dolido por lo que pasó", dijo Flórez al empezar la charla con este medio. Según el hombre, todo ocurrió el viernes en la tarde a la hora de la salida de los chicos. Él ingresó a un aula, justamente a la que asiste su hija, y escuchó cómo uno de los compañeros le decía algo fuera de lugar. "Cuando entré escuché que este nene le dice algo feo a mi hija -no quiso detallar qué insulto le dijeron- y ella empezó a llorar. De inmediato, le dije "soy el papá, decímelo a mí"", contó el hombre y dijo que buscó a la mamá del nene y que le comentó que había retado al niño y le contó cómo fue la situación. Supuestamente la mujer le dijo que iba a hablar con su hijo para ver qué había pasado. Al rato, cuando los chicos estaban por salir, vino hasta donde estaba Flórez y le pegó dos veces en la cara, según el portero. "Me agredió físicamente delante de todos. Estoy dolido de que se manchó mi nombre. Legalmente hice lo que tenía que hacer, por eso la denuncié. Mi conciencia está tranquila y que investiguen todo lo que tengan que investigar. Mis manos están limpias y sé que dentro de poco se va a saber quién es quién", agregó y dijo que es la primera vez en 6 años que pasa por una situación así. A la vez comentó que analiza cambiar a su hija de escuela.

Desde la otra vereda, Cintia Ocaña, la mamá del niño supuestamente agredido, admitió que golpeó al portero, pero dijo que lo hizo por la indignación que sintió. "Cuando vi que mi hijo estaba llorando y me contó lo que le había hecho este hombre me dio bronca. Sé que estuve mal en pegarle, pero me sacó que agrediera a mi hijo", dijo y aseguró que su nene no volverá a la escuela hasta que no saquen a Flórez del establecimiento. Ante esta situación, desde el Ministerio de Educación dijeron que estaban investigando el hecho, y que hasta ayer el portero no era separado del cargo, pues hasta ese momento no se hallaba ningún antecedente en su contra.

Frente a frente


CINTIA OCAÑA - Mamá acusadora

"Mi hijo me contó que el portero le dijo que lo iba a partir. Sus compañeros me dijeron que les gritó que los iba a reventar a todos. Le asenté dos cachetadas porque le puso la mano a mi hijo y no tiene derecho. Otra mamá me contó que él el año pasado agarró a otro chico del cuello".

PABLO FLÓREZ - Portero acusado

"Es la primera vez que estoy viviendo una situación así. En ningún momento tuve contacto físico con nadie, menos con el alumno. De Jesucristo, el hombre más bueno que hubo en la Tierra, dijeron un montón de mentiras; sé que también las van a decir de mí o de cualquier persona".