Natalí Correa y Sandra Roldán tienen vidas totalmente diferentes. Una está soltera y cursa la carrera de Profesorado y Licenciatura en Inglés, mientras que la otra es casada, tiene tres hijos y es docente. Pero comparten una característica en común: tienen la misión de apuntalar la devoción que sus seres queridos sienten por la Difunta Correa. Fueron las primeras en llegar ayer a la convocatoria que la producción de la FNS hizo a promesantes y devotos de la Difuntita, interesados en participar en el Carrusel del Sol que se realizará el próximo viernes 23 de febrero. Tanto ellas como los demás devotos y promesantes participarán del desfile como un testimonio vivo sobre la fe en ella. Por eso lucirán una remera en la que estará impresa la historia de fe que cada uno representa. Además, todos desfilaran a ambos costados del camión con la imagen de la Difunta Correa que trasladará a la Reina y Virreina salientes.

Para acompañar a su padre

Natalí Correa participará del Carrusel en representación de su padre, Julio Correa, a quien la Difunta le "hizo un milagro". Tras encomendarse a ella le arrancó el auto que se había roto.

Para acompañar a su marido

Desde que se casaron hace 21 años, Sandra Roldán acompaña a su marido a visitar el oratorio de la Difunta Correa dos veces al mes. Lo hacen para agradecerle por la salud y el trabajo.