La comunidad internacional hizo ayer un llamado a la calma a los hondureños y solicitó al Gobierno de facto garantizar la seguridad de Zelaya, tras conocerse que el mandatario regresó a Tegucigalpa. El Consejo Permanente de la OEA, convocado a una sesión extraordinaria exhortó a “la firma inmediata” del Acuerdo de San José, propuesto por el presidente de Costa Rica, Oscar Arias, que contempla que Zelaya cumpla su mandato hasta enero de 2010, y demandó que los hondureños actúen con responsabilidad y se abstengan de “actos que puedan generar violencia”. En tanto, la secretaria de Estado de EE.UU., Hillary Clinton indicó que “es imperativo que se establezca un canal de comunicación entre Zelaya y el régimen de facto” y que “cada uno actúe de modo pacífico para tratar de alcanzar un punto de acuerdo”. Según Clinton, “ahora que Zelaya ha regresado sería oportuno devolverle a su puesto bajo las condiciones apropiadas, seguir adelante con las elecciones previstas para noviembre, contar con una transición pacífica de la autoridad presidencial y llevar de nuevo a Honduras al orden constitucional y democrático”.