La noche del domingo pasado, la yegua se alejó de la casa y se internó en el campo. Sus dueños intuyeron que era para parir, pues estaba en fecha. Por eso, al otro día el jefe de casa se levantó temprano y cuando encontró al animal, grande fue su sorpresa cuando descubrió que habían nacido potrillos mellizos, un caso curioso en el mundo equino ya que el vientre de las hembras está preparado para un solo embrión. El hecho sucedió en una finca de Caucete y llenó de felicidad a la familia Fernández, que por cuestiones de espacio tiene a la yegua propiedad de Horacio Trigo. Sin embargo, esa alegría cambió unos días después, ya que la alta tasa de mortalidad en estos casos de potrillos mellizos se cobró la vida del macho recién nacido, el miércoles pasado.

"Mi marido, cuando encontró los potrillos, llegó a la casa emocionado. No podíamos creer que nacieran caballitos mellizos. Los niños le pusieron Peter al macho y Reina a la hembra. Y aunque eran petisitos y flaquitos, andaban corriendo y mamaban mucho. Pero el miércoles, Peter empezó a mostrarse enfermo y lamentablemente murió ese mismo día", contó Nancy Fernández.

Si bien el embarazo doble en equinos no es un hecho inédito, tampoco es común, según dijo José Iranzo, veterinario especialista en equinos. Y sin embargo, contrario a lo que se piensa, en la mayoría de estos casos los mellizos no son deseados, ya que es altísima la probabilidad de muerte de los animales, a la vez que si sobreviven, tienen porte pequeño. "Los embarazos dobles son más frecuentes de lo que se piensa. Lo que pasa es que en la mayoría de los casos, las yeguas abortan espontáneamente a los 8 meses, mientras que es poca la probabilidad de vida de uno de los dos potrillos e ínfima la chance que sobrevivan los dos", explicó Iranzo.

Pero de momento, Reina sigue correteando por Caucete sin su hermano, y esperando día a día ganarle a la estadística.