El 2020 fue un año en que la Escuela Técnica General Manuel Savio, de Calingasta, emprendió un gran desafío y conquistó importantes reconocimientos. El fundamento: los profesores que se desempeñan en esta institución construyeron una camilla cápsula, la primera en la provincia, para trasladar de manera segura a los pacientes con covid-19. No conformes con esta creación inédita, también pusieron en valor la solidaridad donando este elemento sanitario al hospital departamental. 

"Tenemos sentimientos encontrados. Por un lado estamos felices y orgullosos de haber construido esta camilla cápsula, pero a la vez tristes porque la usan a diario, lo que significa que la pandemia nos sigue castigando". Esta fue la reflexión que hizo Alejandro Ponce, director de la escuela calingastina.

Ponce contó que se trata de la primera camilla cápsula fabricada íntegramente por los profesores de la institución y personal hospitalario, utilizando elementos y materiales en desuso y una impresora 3D. Y que funciona con un motor electrónico que permite el intercambio permanente de aire dentro de la cápsula, eliminando el aire viciado luego de ser filtrado. Es desmontable y permite subirla al interior de la ambulancia para su traslado. Trabaja con energía 220 V, 12 V con una batería que le brinda hasta 10 horas de autonomía.

Adaptación. Los creadores calingastinos tuvieron que realizarle varias modificaciones al prototipo para que pudiera caber en la ambulancia.

También agregó que no fue fácil llegar al modelo definitivo. "No sabíamos nada de elementos sanitarios así que tuvimos que investigar mucho antes de comenzar con la camilla. Y fueron varias pruebas y errores que hubo que superar para terminarla. En el primer prototipo la camilla tenía forma cúbica, pero hubo que modificarla y darle forma de arco. También tuvimos que modificar dimensiones y la ubicación del motor para que entrara cómodamente en la ambulancia. Pero finalmente quedó lista y de inmediato la donamos al hospital que era nuestro objetivo final, colaborar con paliar la difícil situación sanitaria que nos afecta a todos" dijo el director.

A raíz de la creatividad de este invento y de su fin solidario, la Escuela Manuel Savio adquirió mayor trascendencia y obtuvo un importante reconocimiento. El Gobierno de San Juan le otorgó el Premio Honor TEC 2020 por sus aportes y donaciones que contribuyen a la lucha contra el covid-19. 

"Estamos realmente orgullosos por este logro que se transforma en un ejemplo para nuestros alumnos, pero sobre todo nos sentimos satisfechos por nuestro pequeño aporte a la salud. Es en momentos como el que estamos viviendo cuando resulta indispensable la creatividad, el servicio y el compromiso de la gente. Por eso, antes de fabricar la primera camilla cápsula, hicimos 1.000 máscaras sanitarias que donamos a la Policía, Gendarmería, Hospital y al municipio de Calingasta", dijo Ponce.

90  días trabajaron para construir la camilla cápsula. Lo hicieron divididos en tres turnos diarios, para poder mantener el distanciamiento.

EL EQUIPO

Los profesores que participaron en la construcción de la camilla son Gabriel Olivera, Alejandro Oliva, Adolfo Córdoba, Roberto Zárate, Paul Campillay, Pablo Rojo, Fany Borquez , Margarita Álvarez, Sergio Castañeda, Franco Ruiz, José Luis Borquez y Alejandro Ponce. Colaboraron Oscar Contreras y Raúl Berón, chofer y enfermero del hospital de Calingasta.